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El bombeo de petróleo crudo se dirige a perforar el piso del 1.4 millones de barriles; la extracción de hidrocarburos líquidos quedó en 1.7 millones de barriles diarios
El bombeo de petróleo crudo de Petróleos Mexicanos (Pemex) cayó en noviembre a su mayor tasa anual en más de cinco años e hiló 24 meses de descensos interanuales, de acuerdo con las estadísticas petroleras de la empresa publicadas este martes 24 de diciembre.
Durante el onceavo mes del año, la extracción de aceite de la petrolera descendió 10.2% a 1.407,000 barriles diarios, en lo que fue su mayor retroceso desde el de 10.3% de abril del 2019, cuando el indicador estaba todavía en la trayectoria bajista que le caracterizó durante la administración del expresidente Enrique Peña Nieto.
Este volumen de bombeo es ya el más reducido para Pemex desde el observado en mayo de 1979, que fue de 1.4 millones de barriles diarios, es decir hace más de 45 años.
El debilitamiento de la producción coincide con la delicada situación de atrasos de la estatal al pago de sus proveedores, entre los que se cuentan múltiples prestadores de servicios de exploración y producción.
Algunos de estos, según fuentes con conocimiento del tema, han pausado o reducido su nivel de actividad, ante la falta de pago de Pemex, que al tercer trimestre del 2024 tenía cuentas por pagar con proveedores por 402,874 millones de pesos (US$19.948), un nivel récord.
De acuerdo con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, la empresa pública se pondrá al corriente de aquí a febrero, mediante pagos parciales.
Al considerar la producción total de hidrocarburos líquidos de Pemex, que incluye también el bombeo de condensados, la historia no es muy diferente.
En noviembre la producción de condensados cayó 8.1% a 267,000 barriles diarios, quedando en su nivel más bajo desde diciembre del 2022 (241,000 barriles diarios).
De modo que la producción de hidrocarburos líquidos (crudo, más condensados) bajó 9.9% a 1.6 millones de barriles diarios, volumen que es el más bajo desde julio del 2020 (1.6 millones de toneles por día).
Desde el sexenio pasado Pemex reporta de manera consolidada su producción de crudo y condensados, si bien estos últimos tienen menor mercado.
Hoy en día los condensados -también llamados gasolinas naturales debido a que son muy ligeros- representan 15.5% de la producción de hidrocarburos líquidos de Pemex y han sido cruciales para detener la caída en el bombeo de Pemex durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo, expertos como Fluvio Ruiz, exconsejero profesional de Pemex, han puesto de relieve la necesidad de que Pemex sea más transparente respecto del destino de esta clase de hidrocarburos.
De enero a noviembre la producción de hidrocarburos líquidos ha caído 5.6% a 1.7 millones de barriles diarios.
Se trata del volumen más bajo desde el 2021 para un mismo lapso de meses (1.7 millones de barriles diarios) y también de la primera caída interanual del indicador desde el desliz de 7.9% observado en el 2019.
Al mirar las cifras de los 11 grandes activos productores de Pemex, se observan caídas en siete. Destacan los descensos observados en cuatro de los principales cinco activos de la petrolera.
De estos últimos el más pronunciado fue el del activo de Cantarell -otrora joya de la corona de las aguas someras mexicanas-, cuyo bombeo se redujo 12.9% a 143,000 barriles diarios.
En el litoral de Tabasco, por su parte, la producción cayó 12.2% a 288,000 toneles por día y en el activo Bellota-Juco hubo una retracción de 10.6% a 339,000 barriles.
En tanto, Ku-Maloob-Zaap, que desde hace ya más de una década es el principal activo de la estatal, tuvo un descenso de 4.4% a 589,000 barriles diarios, que aportaron un tercio del bombeo total de crudo y condensados de Pemex.
La nueva realidad de los activos declinantes de Pemex, con todo y que en el sexenio pasado se estabilizó la producción de hidrocarburos, ha obligado a recalibrar las metas productivas de la estatal.
Para este sexenio, el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo se ha planteado una meta de producción nacional de 1.8 millones de barriles diarios.
Sin embargo, este volumen contempla también la producción de los operadores privados que detentan los contratos de producción que fueron subastados en el sexenio del expresidente Enrique Peña Nieto, luego de que se abriera el sector al capital privado.
De acuerdo con la Estrategia Nacional del Sector de Hidrocarburos y Gas Natural (Enshgn) presentada el pasado 13 de noviembre, la meta de producción promedio de Pemex para el 2025-2030 es de un millón 702,200 barriles diarios.
En tanto, la producción de privados promediaría 99,333 toneles por día, teniendo su pico en el 2026, con 112,000 barriles diarios.
De acuerdo con la Enshgn, para este sexenio será prioritaria la atención de campos estratégicos como Zama y Trion, donde Pemex tiene asociaciones con privados.
Además, se impulsarán proyectos mixtos (público-privados) “que permitan incrementar la reserva y la producción”, pero siempre bajo el control societario de Pemex.
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