La receta de la multinacional chilena Buffalo Waffles para dar el salto a Europa

Los dos socios fundadores de la cadena chilena Buffalo Waffles, Stefan Feddersen y Thomas Schulze-Boing, están apostando por seguir creciendo en la industria gastronómica y aumentar su presencia ya no solo en el país, sino también hacia otros mercados, aun cuando los efectos de la pandemia siguen impactando al sector.

La historia del negocio se remonta a 2013, cuando luego de un viaje a Argentina entraron a una tienda que vendía waffles dulces y salados, y asimilando esa idea, pero con ingredientes gourmet y nuevas combinaciones, decidieron apostar por el proyecto en territorio nacional y montaron su primer local en Merced 315, establecimiento que hoy es el más ícono de la cadena. Lo anterior, en un momento en el que la comercialización de este tipo de comidas en nuestro país era desconocida.

Después de ese primer paso, compraron un food truck para aterrizar en eventos y hacer conocer la marca. En 2014 abrieron su segundo establecimiento en Providencia, y empezaron a operar el modelo de franquicias tras el interés que veían. Ahí, dicen, empezaron a expandirse con más fuerza y llegaron a regiones.

"A través de ellos (franquiciados) comenzamos a crecer de forma más explosiva. Duplicamos el tamaño de la empresa cuando partió el estallido social y cuando llegó la pandemia, a diferencia de algunas cadenas del rubro gastronómico, en vez de frenar el crecimiento o no abrir más locales, nosotros abrimos mucho más", señalan.

Si bien hubo periodos en los que tuvieron que cerrar sus tiendas físicas, los acuerdos con las firmas de última milla y la venta por su e-commerce con Justo, permitieron continuar la operación. Además, en paralelo comenzaron a cerrar acuerdos con los centros comerciales para obtener más puntos de venta, ya que en esos momentos, afirman, los arriendos estaban más baratos. "Aprovechamos todas las opciones que surgieron con la pandemia", sostienen.

Expansión a regiones

De ese modo, detallan que si para marzo de 2020 contaban con 12 locales a lo largo del país, ese ejercicio lo terminaron con 23 puestos de ventas. Mientras, en 2021 siguieron con su estrategia, a través de franquicias, de abrir nuevos establecimientos y cerraron el año pasado con 42 locales.

Para 2022 el plan es abrirse paso a regiones y ganar mayor participación, poniendo énfasis en la zona norte en el que ven un nicho de crecimiento. Sin embargo, también tienen a la vista los desafíos que eso implicará, ya que en el año pasado el proceso de apertura tampoco estuvo exento de problemas. "Fue un desafío. Los costos en la construcción aumentaron un 50%-60% y eso se ha notado harto y va a desacelerar un poco el ritmo de las aperturas. Ahora abrir un local requiere 40% más de inversión", advierten.

Si bien el total de nuevos locales que buscan abrir este año no está del todo cerrado, sí estiman tener más de 10 nuevos puntos de venta.

Y, a pesar de que la industria gastronómica aún se ve afectada por los efectos de la crisis sanitaria, los fundadores de Buffalo Waffles son optimistas frente a la operación del 2022 y estiman una fuerte alza de sus ventas. Si en 2021 obtuvieron ingresos por $5.700 millones, con su plan de nuevas aperturas y las menores restricciones de operación, esperan que en 2022 las ventas asciendan a $9.000 millones.

Nuevos mercados

En medio de su expansión en Chile, los socios de la cadena de waffles también alistaron su expansión fuera del país. En efecto, en septiembre del año pasado arribaron por primera vez a Madrid, España.

Esto, luego de que uno de sus franquiciados les presentará el proyecto de expandir el negocio y que se hiciera cargo de la marca en esa ciudad. "La idea es que se comience con unos cinco o seis locales propios, validar el modelo, que los números están andando bien, y luego que esa persona se encargue de sub franquiciar la marca como lo hicimos nosotros acá en Chile, pero hacerlo en España", detallan.

Si bien apenas llevan un par de meses operando la tienda, los socios afirman que la recepción del público ha sido la esperada y, por lo mismo, en septiembre de 2022 abrirán oficialmente su segunda tienda Buffalo Waffles, también en Madrid.

"Es un gran desafío partir con una marca de cero; es como lo que nos pasó en Chile, que comenzamos con nada, pero ahora la ventaja es que tenemos ocho años de experiencia que nos han permitido partir de una forma mucho más profesional, con un plan de marketing, con campaña, con una agencia, con un local que se armó con un proyecto de arquitectura, todo", destacan.

Frente a la posibilidad de arribar a otros mercados, los ejecutivos tampoco se cierran a esa idea, de hecho, ya tienen avanzado algunos planes en arribar a otros países de Latinoamérica. Sin embargo, a corto plazo se centrarán en concretar un plan de expansión en España. "Ya estamos pensando en abrir puntos en Valencia, Barcelona y Málaga", afirman.