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El Reino Unido intensificó sus amenazas de revocar el acuerdo posterior al Brexit sobre el comercio con Irlanda del Norte
Es probable que la Unión Europea se mueva rápidamente para iniciar procedimientos de infracción contra el Reino Unido y suspender su acuerdo comercial si el gobierno de Boris Johnson presenta una legislación para revocar sus compromisos sobre el comercio con Irlanda del Norte, según una persona familiarizada con el asunto.
La Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE en Bruselas, sería responsable de recomendar un curso de acción, mientras que la decisión final sobre los detalles y el momento de cualquier medida necesitaría el respaldo de los estados miembros.
Además de congelar el acceso privilegiado que tienen las empresas del Reino Unido al mercado único de la UE, la comisión también detendría las conversaciones sobre el estatus de Gibraltar, dijo la persona, que pidió no ser identificada al comentar sobre discusiones privadas.
El Reino Unido intensificó sus amenazas sobre el acuerdo posterior al Brexit para Irlanda del Norte el martes por la noche cuando la secretaria de Relaciones Exteriores, Liz Truss, emitió un comunicado diciendo que las últimas propuestas de la UE sobre acuerdos comerciales no funcionarán y señaló que está preparada para tomar medidas unilaterales a menos que un nuevo acuerdo pueda ser negociado.
El gobierno “no dudará en tomar medidas para estabilizar la situación en Irlanda del Norte si no se encuentran soluciones”, dijo Truss. Meses de conversaciones con la Unión Europea sobre el tratado posterior al Brexit habían llevado a propuestas que “nos harían retroceder”, dijo, argumentando en contra de introducir “más controles, papeleo e interrupciones”.
El portavoz de Johnson, Max Blain, dijo a los periodistas en una sesión informativa periódica el miércoles que el gobierno no ha tomado ninguna decisión sobre cómo proceder. Pero calificó la situación en Irlanda del Norte de “muy grave” y reiteró la posición del Reino Unido de que los arreglos posteriores al Brexit para la región incluidos en el protocolo no pretendían ser una solución “terminada”.
Gran Bretaña ha amenazado durante mucho tiempo con eliminar la necesidad de controles sobre los bienes que se envían desde Gran Bretaña a Irlanda del Norte mediante la activación del Artículo 16, un mecanismo acordado con la UE que forma parte del acuerdo comercial Brexit. El Reino Unido argumenta que el protocolo está interrumpiendo el comercio entre Irlanda del Norte y el resto del Reino Unido y poniendo en peligro el Acuerdo del Viernes Santo que ayudó a poner fin a años de violencia sectaria en la región.
Sin embargo, el Times de Londres informó el martes que Truss redactó una ley para descartar unilateralmente gran parte del acuerdo después de perder la fe en las negociaciones. Ese sería un movimiento más dramático por parte del Reino Unido y probablemente provocaría una reacción más severa de la UE.
Cualquier decisión requeriría el respaldo de los 27 gobiernos de la UE del bloque y daría lugar a un período de enfriamiento antes de que entren en vigor aranceles, cuotas y otras barreras al comercio entre Gran Bretaña y la UE. La UE podría rescindir todo el acuerdo o apuntar a industrias específicas.
'No es una opción'
El vicepresidente de la Comisión Europea, Maros Sefcovic, advirtió más tarde el martes que el protocolo es un acuerdo internacional y su “renegociación no es una opción”. Dijo que la UE ha trabajado incansablemente para proponer soluciones, incluida la facilitación del flujo de medicamentos hacia Irlanda del Norte. Se reunirá con Truss nuevamente el jueves.
El año pasado, la UE detuvo la amenaza de emprender acciones legales por incumplimientos separados del protocolo para dar a las dos partes espacio para negociar.
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