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El bloque europeo y cuatro países de América Latina firmaron uno de los acuerdos comerciales más grandes en el mundo
Después de 25 años de conversaciones y oposición de mandatarios como Emmanuel Macron, Mercosur y la Unión Europea llegaron a un acuerdo comercial. Ayer, en la LXV Cumbre del Mercosur, los líderes de los países miembros se reunieron con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y llegaron a un consenso sobre el texto final con el que conforman un mercado de 780 millones de habitantes.
“Este es un acuerdo en el que todos ganan, no es sólo una oportunidad económica, es una necesidad política. Sé que vienen fuertes vientos en dirección contraria, hacia el aislamiento y la fragmentación, pero este acuerdo es nuestra respuesta”, dijo Von der Leyen.
Ahora, lo que sigue es un proceso de traducción, firma y ratificación, lo cual podría demorar hasta 18 meses. En Europa, el acuerdo comercial requiere la aprobación de 15 de los 27 miembros de la UE, que representan 65% de la población del bloque, junto con una mayoría simple en el Parlamento Europeo.
Alemania y España son fuertes partidarios del acuerdo pero Francia y Polonia son declarados opositores y buscarán que Italia también lo rechace.
En el anuncio, Von der Leyen, recalcó que el acuerdo es una victoria para Europa y se crearán “enormes oportunidades comerciales y se protegerá a los agricultores de su bloque”, pues esta es la principal preocupación de quienes están se oponen al considerar que llegarán productos de América Latina con estándares inferiores, lo que generará competencia desleal.
El canciller de Uruguay, Omar Paganini, señaló que con el tratado se dará oportunidad de que se radiquen inversiones de la Unión Europea en los países miembros. Afirmó que el acuerdo supone un hito sin precedentes para el bloque debido a su tamaño, amplitud temática y significado político.
Entre los beneficios que se alcanzarán con el acuerdo sobre salen los del sector del agro, justo los de mayor tensión en Europa. Está la eliminación de aranceles por parte de Europa en 70% de los productos que exporta el bloque suramericano. También la rebaja en el impuesto que paga el cupo de carne de alta calidad “Hilton”, y los países de Mercosur podrán vender 99.000 toneladas más de carne bovina y 60.000 de arroz.
Se eliminarán aranceles en productos como los lácteos, los agroalimentarios y el vino. Adicional, el Instituto de Investigación Económica Aplicada de Brasil mostró que las exportaciones brasileñas relacionadas con la agricultura al bloque europeo podrían crecer en US$7.100 millones entre 2024 y 2040.
En otro sector, los exportadores de carros de la Unión Europea se beneficiarán de la eliminación gradual de los aranceles actuales de 35%. También se eliminarían los derechos sobre productos industriales como piezas de automóviles, maquinaria, productos químicos, prendas de vestir y textiles.
Armando Ardila, director de Teknidata Consultores, señaló que el acuerdo le ayudará a Europa a exportar más manufacturasy tener acceso a minerales críticos para su transición energética, y Mercosur incrementará su venta de commodities.
Los negociadores acordaron una versión del acuerdo comercial en 2019, que las naciones europeas se negaron a ratificar, por preocupaciones ambientales después de la elección del expresidente brasileño Jair Bolsonaro y el aumento de los incendios en la selva amazónica.
La UE pidió garantías medioambientales pero Mercosur lo leyó proteccionismo que exigía más concesiones. En recientes conversaciones en Brasilia y Montevideo finalmente se cerraron dudas ambientales, de compras gubernamentales y otros temas polémicos, lo que allanando el camino para la firma.
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