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El reputado y millonario inversionista siempre ha tenido claro que "hay que ser avariciosos cuando otros salgan del mercado"
Warren Buffett se reafirma y hace gala de una de sus máximas de los últimos años. El presidente del conglomerado financiero Berkshire Hathaway está cumpliendo con su consejo estrella: "En los momentos de mayor pujanza económica, debemos ahorrar y trabajar duramente. En cambio, cuando el mercado caiga será el momento de realizar inversiones".
Y este momento ha llegado. Wall Street ha caído con fuerza en las últimas semanas debido a varios frentes abiertos que acechan al mercado: el repunte de la inflación, las dudas en torno a la recuperación económica y la guerra entre Rusia y Ucrania han puesto en jaque a todos los índices mundiales, especialmente a los de EE.UU.
El Dow Jones, el S&P y el Nasdaq registran descensos de entre 11% y 26% desde el inicio de enero. Con ello cotizan en zona de mínimos de, al menos, marzo de 2021.
En este contexto, Buffett no tiene miedo. El reputado inversor siempre ha tenido claro que "hay que ser avariciosos cuando otros salgan del mercado". Esta semana ha anunciado sus últimos movimientos en cartera a la Comisión de Valores y Bolsa de Estados Unidos (la SEC, por sus siglas en inglés), que demuestran una intensa actividad.
Desde el inicio del ejercicio, lleva invertidos US$51.000 millones en distintas compañías. La cifra contrasta drásticamente con todo el ejercicio 2021, en el que apenas destinó US$7.000 millones, y es récord desde 2008.
Entre sus principales apuestas, ha destinado US$21.000 millones a la compañía petrolera Chevron, la empresa más alcista del Dow Jones desde el inicio del año. Acumula un avance del 47% en 2022. Además, ha invertido US$10.000 millones en otra compañía energética, Occidental Petroleum, que se anota 134% este ejercicio.
Cambios notables en el sector financiero
Otro de los movimientos que destacan ha sido en el sector financiero. El inversionista ha abandonado el capital de Wells Fargo y ha entrado en Citi. Tiene además posiciones importantes dentro del sector en Bank of America y American Express. Estos valores ceden 21% y 4%, respectivamente, en 2022.
El movimiento ha sido acertado ya que Wells Fargo arrastra algunos problemas de los escándalos pasados y su actual jefe, Charlie Scharf, se plantea la venta de parte del negocio. La entidad acumula una caída del 15% en Bolsa este año.
Entre el resto de movimientos que aún no habían trascendido, destacan los US$2.600 millones de inversión en Paramount, US$390 millones en Ally Financial (una financiera de automóviles, competidora de Santander) y ha tomado participaciones menores en la compañía sanitaria McKesson, en la aseguradora Markely en la química Celanese.
También ha elevado el peso en cartera en General Motors y en la compañía de muebles RH. En un trimestre de mucha actividad en el mercado, el inversor ya había adelantado algunos movimientos en la junta de accionistas celebrada hace unas semanas. En los últimos días Berkshire Hathaway también ha informado de que ha reducido al mínimo su participación en Verizony ha salido de Bristol-Myers Squibb y de AbbVie.
Actualmente, el conglomerado financiero dirigido por Buffett posee participaciones en unas 90 empresas. Entre ellas, destaca la de Coca Cola.
Buffett tiene claro que pese al repunte de la inflación, hay que fijarse en compañías que uno comprenda. Para él, Coca-Cola es un claro valor defensivo en estos momentos ya que considera que la gente seguirá queriendo su gaseosa favorita dentro de décadas, y que la inflación no jugará ningún papel para esta empresa. "No importa lo que haya pasado con el nivel de precios, porque las personas continuarán pagando por los productos que le gustan", dijo recientemente el gurú. Las acciones de la compañía avanzan 12% en 2022.
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