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El gobierno enfrenta crecientes críticas por recortes en salarios y beneficios, mientras intenta equilibrar la moderación fiscal
El Ministerio de Finanzas checo presentó un plan para reducir el déficit presupuestario en el año electoral 2025, iniciando así las disputas en la coalición sobre las prioridades de gasto mientras los partidos gobernantes se enfrentan a un creciente descontento público. Una propuesta publicada el domingo en el sitio web del ministerio reduciría el déficit a US$10.200 millones.
El gobierno está caminando sobre la cuerda floja mientras intenta cumplir su promesa de moderación fiscal y al mismo tiempo aumentar los fondos para defensa, carreteras y educación antes de las elecciones generales del próximo otoño. Los cinco partidos de la coalición están cayendo en las encuestas de opinión y están recibiendo críticas de los sindicatos y la oposición por limitar el crecimiento de los salarios del sector público y algunos beneficios sociales.
“Si bien nuestra administración se ha comprometido a seguir reduciendo el déficit presupuestario, hemos encontrado un compromiso razonable”, dijo el ministro de Finanzas, Zbynek Stanjura, en un comunicado. “Creo que el presupuesto propuesto también mantiene la paz social”.
Sin embargo, el proyecto ya está provocando cierta tensión dentro de la coalición gobernante. El ministro de Desarrollo Regional, Ivan Bartos, líder del partido gubernamental más pequeño, dijo, según el servicio de noticias CTK, que la propuesta era “inaceptable” porque recortaba de hecho la financiación de su programa destinado a construir más viviendas.
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