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En Estados Unidos, los inventarios de gasolina y diésel se han desplomado a mínimos estacionales de varios años
La crisis de suministro de energía que ha disparado los precios petróleo probablemente pasará de ser un problema de varios meses a uno de varios años si la guerra de Rusia no termina pronto, según Bank of America.
El gran desafío que enfrenta el mercado del petróleo está en solucionar el lado de la oferta, dijo Francisco Blanch, jefe de investigación global de productos básicos y derivados del banco en una entrevista en Bloomberg TV. “Necesitamos aumentar nuestra inversión en el sector energético”.
Además, la industria energética necesita orientación sobre cómo aumentar la oferta dado que, entre otras presiones, ha soportado varios años de bajos retornos. Bank Of America inicialmente esperaba que la demanda de petróleo creciera 3,5 millones de barriles por día este año a 100 millones de barriles por día, pero debido a los desafíos de la oferta, ahora ve un crecimiento de la demanda de 2 millones de barriles.
Los flujos de energía se han visto alterados desde que Rusia invadió Ucrania, agotando los suministros ya escasos en un mundo que se está recuperando de la pandemia. En Estados Unidos, los inventarios de gasolina y diésel se han desplomado a mínimos estacionales de varios años a medida que aumenta la demanda de verano, mientras que la capacidad de refinación para fabricar combustibles ha disminuido, lo que ha llevado los precios de las gasolineras a niveles récord.
Mientras tanto, Blanch reiteró que se espera que los precios del petróleo avancen hacia los US$150 el barril y posiblemente más, dependiendo de los acontecimientos en Europa.
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