Exportaciones del petróleo de Rusia se recuperan luego de problemas de transporte

Los envíos marítimos de petróleo de Rusia se recuperaron con fuerza tras dos semanas de interrupciones, con flujos récord desde las principales terminales de exportación del país.

Cerca de once buques petroleros completaron la carga del crudo Espo del país en el puerto de Kozmino, en el Pacífico, recuperándose así de la tormenta que redujo a la mitad las exportaciones la semana anterior e igualando los máximos anteriores. Los volúmenes desde el puerto báltico de Ust-Luga también aumentaron en la semana hasta el 4 de febrero, después de que las obras de mantenimiento redujeran los flujos a finales del mes pasado, mientras que los envíos desde Primorsk igualaron el récord de la semana anterior.

Gracias a este repunte, la media semanal de envíos aumentó en unos 880.000 barriles diarios, alcanzando el nivel más alto del año. Ello situó los flujos 400.000 barriles diarios por encima del nivel que Moscú se ha comprometido a alcanzar con sus socios de la Opep+ para el primer trimestre en términos semanales, aunque 100.000 barriles diarios por debajo de ese objetivo en términos cuatrisemanales, lo que ayuda a suavizar los factores a corto plazo.

Los exportadores rusos se ven obligados a depender en mayor medida de sus propios petroleros y de una flota en la sombra de buques anticuados, ya que los armadores griegos se han retirado del comercio de crudo ruso tras el recrudecimiento de las sanciones estadounidenses. Según los datos de seguimiento de buques recopilados por Bloomberg, el número de petroleros de propiedad griega que transportan el crudo de Moscú cayó en enero a sólo una quinta parte de los niveles registrados el pasado mes de mayo.

Rusia ha anunciado que recortará las exportaciones de petróleo en 500.000 barriles diarios por debajo de la media de mayo-junio durante el primer trimestre, después de que varios otros miembros del grupo Opep+ acordaran realizar nuevos recortes de la producción. El recorte ruso se repartirá entre los envíos de crudo, que se reducirán en 300.000 barriles diarios, y los productos refinados.

Los cargamentos rusos de crudo siguen transitando por el sur del Mar Rojo, a pesar de los ataques a los buques mercantes por parte de los rebeldes houthis con base en Yemen. Los Houthis aseguraron a Rusia y China que el grupo está "dispuesto a garantizar el paso seguro de sus buques por el Mar Rojo". Sin embargo, los dos únicos petroleros que, según los informes, han sido atacados frente a las costas de Yemen transportaban cargamentos rusos. El Sai Baba, que transportaba crudo de los Urales, fue alcanzado por un dron frente a Yemen el 23 de diciembre, mientras que el Marlin Luanda, alcanzado por un misil e incendiado el mes pasado, transportaba nafta rusa.