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El ejército israelí afirmó que Irán lanzó unos 170 aviones no tripulados, 30 misiles de crucero y 120 misiles balísticos
Israel y sus aliados, incluidos Estados Unidos, Reino Unido y Francia, lograron frustrar en su mayor parte un ataque sin precedentes de Irán contra el Estado judío.
La República Islámica disparó más de 300 drones y misiles contra Israel el sábado por la noche. Casi todos fueron interceptados antes de alcanzar el espacio aéreo israelí y no se registraron víctimas mortales. Una niña israelí de 10 años resultó gravemente herida por la caída de metralla, mientras que una base militar sufrió daños leves.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, condenó enérgicamente el ataque, el primero contra Israel desde suelo iraní, y las autoridades israelíes advirtieron de que se trataba de "una escalada grave y peligrosa" por parte de Teherán.
Sin embargo, ninguno de los dos dijo que tomaría represalias contra Irán, que había prometido un ataque contra Israel después de que el complejo de su embajada en Siria fuera alcanzado por misiles el 1 de abril, matando a siete oficiales iraníes.
Irán dijo que no llevaría a cabo nuevos ataques en ausencia de una reacción contundente por parte de Israel. Las bolsas de Israel, Arabia Saudí y otros países de Oriente Próximo cayeron el domingo, pero sólo ligeramente.
"Consideramos que esta operación ha logrado un resultado completo y no hay intención de continuarla", declaró el domingo el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas iraníes, Mohammad Bagheri, a la televisión estatal. Irán era capaz, dijo, de un ataque "decenas de veces" mayor pero delibe
Biden hablará con los líderes del Grupo de los Siete el domingo "para coordinar una respuesta diplomática unida", según un comunicado de la Casa Blanca.
Habló con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y reiteró que el apoyo de Washington al país era "férreo". Sin embargo, dijo que EE.UU. no apoyaría un contraataque israelí contra Irán, informó Axios, citando a un funcionario no identificado de la Casa Blanca.
Se espera que el gabinete de Israel se reúna el domingo por la tarde para discutir la respuesta del país.
"Esta campaña aún no ha terminado y debemos seguir preparados", declaró el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant. "Israel ha resistido el ataque de esta noche. Las FDI bloquearon este ataque de la manera más impresionante, junto con nuestros socios. El mundo entero ha visto esta noche lo que es Irán, un país de terror".
Los precios del petróleo subieron tras el ataque a Siria, con el Brent escalando por encima de los US$90 el barril y los analistas afirmando que podría alcanzar los US$100 en caso de conflicto directo entre Irán e Israel. El shekel israelí se debilitó y se acercó a su nivel más bajo de este año.
El domingo, las acciones israelíes subieron hasta 0,7% en las primeras operaciones, pero revirtieron esas ganancias a las 11:40 a.m. en Tel Aviv. Arabia Saudí, que declaró estar "profundamente preocupada por los acontecimientos de escalada militar en la región", vio caer su principal bolsa 0,5%.
"Irán diseñó su represalia para causar el máximo simbolismo, pero el mínimo daño", dijo Ziad Daoud, economista jefe de mercados emergentes de Bloomberg Economics. "Por sí sola, no debería mover los mercados. Pero si desencadena una contra-respuesta israelí, entonces estamos entrando en una espiral muy peligrosa". La clave de lo que ocurra después es si EE.UU. puede contener la reacción israelí".
El ejército israelí afirmó que Irán lanzó unos 170 aviones no tripulados, 30 misiles de crucero y 120 misiles balísticos. Sólo estos últimos penetraron en el espacio aéreo israelí y en "número muy reducido", según las Fuerzas de Defensa de Israel. Todos los drones y misiles de crucero fueron interceptados antes de llegar a Israel.
Sonaron múltiples alarmas en varios puntos de Israel: Jerusalén, Beer Sheva y Dimona, en el sur, y el asentamiento judío de Ariel, en Cisjordania. Los habitantes de Jerusalén oyeron explosiones. También sonaron alarmas en el norte de Israel. Las FDI dijeron que habían cortado los servicios de GPS en algunas zonas para ayudar a contrarrestar el ataque.
Un funcionario de defensa estadounidense confirmó que sus fuerzas en la región -reforzadas desde que estalló la guerra entre Israel y Hamás el 7 de octubre- derribaron drones lanzados por Irán.
También participaron fuerzas británicas y francesas.
"Gracias a estos despliegues y a la extraordinaria pericia de nuestros militares, hemos ayudado a Israel a derribar casi todos los drones y misiles", declaró Biden.
Israel ha mejorado considerablemente sus defensas aéreas en la última década y media, añadiendo nuevos sistemas de interceptación de misiles balísticos disparados desde lugares tan lejanos como el Océano Índico.
La defensa aérea más activa y conocida de Israel es la Cúpula de Hierro, que ha interceptado miles de cohetes disparados por militantes palestinos en Gaza desde 2011. Pero la Cúpula de Hierro está diseñada para misiles y drones de corto alcance, y es solo uno de los avanzados sistemas de defensa antimisiles existentes.
Israel también tiene un interceptor de medio a largo alcance conocido como David's Sling y el sistema de defensa Arrow.
El primer ministro del Reino Unido, Rishi Sunak, fue uno de los primeros líderes en responder al ataque de Irán. "El Reino Unido seguirá defendiendo la seguridad de Israel y la de todos nuestros socios regionales, incluidos Jordania e Irak", declaró Sunak en un comunicado.
Francia, Alemania, la Unión Europea y Japón también condenaron las acciones de Irán.
También lo hizo el Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, que pidió el cese inmediato de las hostilidades, citando el riesgo de una "escalada devastadora en toda la región." Israel solicitó una sesión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU.
El asalto podría agravar un conflicto en Oriente Próximo que comenzó cuando miles de operativos de Hamás irrumpieron en Israel desde Gaza, matando a unas 1.200 personas y secuestrando a 250. Las represalias israelíes por tierra y aire contra Gaza han causado la muerte de más de 33.000 personas, según el Ministerio de Sanidad de Hamás, provocando la ira del mundo musulmán y de otros países.
Estados Unidos y la UE consideran a Hamás una organización terrorista.
Un enfrentamiento directo entre Irán e Israel podría atraer al grupo libanés Hezbolá, que al igual que Hamás cuenta con el apoyo de Irán, y aumentar la posibilidad de una guerra regional. El suministro de petróleo del Golfo Pérsico también podría verse afectado.
El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, advirtió en repetidas ocasiones de que Israel sería "castigado" por el mortífero ataque en Damasco, que destruyó el edificio del consulado de la República Islámica y causó la muerte de al menos 13 personas. Israel no reivindicó la autoría del ataque, pero tampoco la negó.
Uno de los oficiales muertos fue Mohammadreza Zahedi, general del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica y el iraní de más alto rango asesinado desde que Estados Unidos, bajo el mando del entonces presidente Donald Trump, asesinó a Qassem Soleimani en Irak en 2020.
Tras la muerte de Soleimani, Irán lanzó ataques contra bases militares estadounidenses, pero no mató a nadie. Irán amenazó el domingo con volver a atacar bases estadounidenses en Oriente Medio si la Casa Blanca ayudaba a Israel a responder al ataque del sábado por la noche.
Irán respalda a grupos antiisraelíes y antinorteamericanos en toda la región. Juntos, se les suele llamar el "eje de la resistencia". Incluyen a Hamás y Hezbolá, así como a los Houthis en Yemen y a las milicias en Siria e Irak.
Los houthis utilizaron la guerra de Gaza como pretexto para atacar con misiles a buques comerciales en el Mar Rojo y el Golfo de Adén, mientras que Hezbolá ha intercambiado disparos a través de la frontera con Israel casi a diario desde la incursión.
Los grupos apoyados por Irán en Irak y Siria atacaron regularmente bases estadounidenses con misiles y aviones no tripulados a finales del año pasado y en enero. Esos ataques cesaron en su mayor parte después de que tres soldados estadounidenses murieran en Jordania por un ataque de un avión no tripulado a finales de enero y el Pentágono respondiera atacando instalaciones vinculadas a Irán en la región.
También el domingo, Israel declaró que Hamás había rechazado la última propuesta de alto el fuego de los mediadores.
Hamás rechazó el borrador presentado por los mediadores, según el Mossad, la agencia de inteligencia exterior israelí.
Aunque el Mossad no dijo directamente que los ataques con drones y misiles de Irán contra Israel fueran los culpables, afirmó que el líder de Hamás en Gaza, Yahya Sinwar, "sigue explotando la tensión con Irán" y "no quiere un acuerdo humanitario ni la devolución de los rehenes."
Estados Unidos, Qatar y Egipto están mediando en las conversaciones.
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