MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
El diario británico habla de cómo el programa financiero más grande de la historia del FMI fue mal pensado
Es probable que las reuniones anuales del FMI y el Banco Mundial de esta semana en Washington estén dominadas por la creciente preocupación por la desaceleración económica mundial. Así comienza el artículo del Financial Times, escrito por el profesor de economía internacional en la American University, Arturo C. Porzecanski.
En un esfuerzo por preparar mejor al FMI para enfrentar los desafíos planteados por esa desaceleración, también se dedicará tiempo a un plan para recaudar fondos para el organismo como parte de la 15a revisión general y el aumento de las cuotas de membresía, un tema que probablemente no avance dado el estado de confrontación de las relaciones entre Estados Unidos y China, indica la publicación.
"Sin embargo, en la agenda de múltiples reuniones principales y secundarias, está el proverbial elefante en la habitación: Argentina", subraya Arturo Porzecanski en un tercer párrafo.
Si bien es demasiado pronto para que el Fondo inicie una autopsia formal, realizada por última vez por su personal y su Oficina de Evaluación Independiente en 2004 tras la debacle de Argentina de 2001-02, "llegó el momento de reflexionar seriamente sobre cuál fue el error del paquete de rescate del año pasado", resume la publicación. Y en ese punto, hace foco en los culpables. "La culpa no debe atribuirse únicamente a Argentina. La primera pregunta es si el FMI debería dedicar tantos fondos al esfuerzo de estabilización financiera de cualquier país como lo hizo en este caso, en lugar de desempeñar un papel más catalizador".
En junio de 2018, el Fondo ofreció un acuerdo de reserva de "acceso excepcional" de 36 meses que preveía desembolsos de US$50.000 millones, o US$35.400 millones de los derechos especiales de giro (DEG) del FMI, su moneda interna. Esta suma es igual a 11 veces el tamaño de la cuota del FMI de Argentina.
Según el Financial Times, la tinta de ese acuerdo apenas se había secado cuando el programa económico se descarriló. En lugar de proceder con mayor cautela, en septiembre de 2018 el Fondo ofreció ampliar su préstamo a US$57.000 millones - DEG 40.700 millones, o 13 veces la cuota de Argentina - a cambio de un ajuste adicional modesto de las clavijas fiscales y monetarias de Argentina.
El artículo del diario señala: "Ambas sumas comprometidas fueron lejos las más elevadas en la historia del FMI en términos absolutos, mientras que la segunda cantidad se ubica entre las cuatro más altas en relación con las cuotas de los países", resumió.
"El mayor standby para Argentina eclipsa lo que anteriormente habían sido los programas más grandes del FMI con Brasil en 2002 (DEG 22.800 millones) y Grecia en 2010 (DEG 26.400 millones). El programa de reserva anterior de Argentina con el FMI (2001-03) fue un DEG más modesto de 16.900 millones".
Los DEG 32.000 millones ya desembolsados a Argentina representan el 47% del crédito total del Fondo. En igualdad de condiciones, la exposición crediticia del FMI a Argentina alcanzaría el 60% de su total si los fondos restantes del programa se desembolsaran pronto.
"El tamaño y la concentración de dicho crédito único en los libros del FMI es alarmante", advierte Porzecanski para el FT. Además, los riesgos crediticios crecen diariamente porque Argentina está utilizando el dinero del Fondo para apuntalar el peso. Desde principios de abril, el banco central se consumió más de US$30.000 millones de sus reservas internacionales, a pesar de haber recibido US$16.000 millones del FMI.
Fuente: Arturo C Porzecanski es profesor de economía internacional en la American University, Washington DC
“Hay un pesimismo ideológico de los grandes empresarios en este país”, dijo el mandatario. La frase generó varias reacciones entre los gremios del sector productivo
El informe dio cuenta de los altos niveles de deuda pública y privada en el mundo, y la presión que ejercen estos sobre las tasas
CaixaBank estima que la economía se habría expandido 3,1% sin el impacto de las tormentas