Peltz Showdown inicia la lucha por un cupo en la Junta de Accionistas de Disney

Mientras el renombrado inversionista activista Nelson Peltz se prepara para un gran enfrentamiento público con Walt Disney Co., sigue el ejemplo de un viejo libro de jugadas, creado en el apogeo de los asaltantes corporativos.

Peltz, quien ha dicho que Disney está en crisis, repleto de ejecutivos pagados en exceso que a su vez han pagado en exceso por otras compañías, presentó documentos el jueves para comenzar una lucha por poder para un puesto en la junta. Disney está pidiendo a los accionistas que rechacen la propuesta y planea presentar su propia declaración de poder preliminar la próxima semana, luego de no poder persuadir en privado a Peltz y su firma, Trian Partners LP, para que retrocedan.

La pelea se remonta a los días de los intrépidos asaltantes corporativos, cuando Peltz comenzó, en lugar de las propuestas más gentiles de los accionistas presentadas por los activistas sociales en las reuniones anuales de hoy, según Jo-Ellen Pozner , profesora asistente de administración en la Universidad de Santa Clara.

“Es un poco inesperado; el tono del panorama del gobierno corporativo no es tan activo y tan público”, dijo en una entrevista. "Se siente como un retroceso a los años 80".

Cuando Disney responda a Peltz, probablemente lo hará con el mismo vigor. La compañía puede resaltar las debilidades en las presentaciones de Peltz a los accionistas, incluidas fallas en sus cálculos de rendimiento, declaraciones erróneas de hechos y una falta general de estrategia específica, según personas familiarizadas con el pensamiento de la compañía, que pidieron no ser identificadas discutiendo conversaciones estratégicas privadas.

Peltz dijo en sus presentaciones públicas que se le ofreció un “acuerdo de intercambio de información y de observador/asesoramiento”, pero solo si aceptaba restricciones sobre lo que podía hacer con sus acciones. Disney le ofreció a Peltz acceso a la información y a su directorio, pero no le ofreció un asiento en sus reuniones, dijeron personas familiarizadas con el asunto.

Disney también podría ir tras la edad del inversionista activista. Peltz tiene 80 años. Las pautas de gobierno corporativo de Disney dicen que no debe nominar a un candidato de la junta para la reelección que tenga 75 años o más, a menos que la junta determine que existen circunstancias especiales para hacerlo.

El gigante del entretenimiento aún no ha fijado una fecha para su reunión anual. La del año pasado fue a principios de marzo. De vez en cuando, es probable que Disney y sus consultores se comuniquen con grandes inversionistas y firmas de asesoría de representantes, como los Servicios de Accionistas Institucionales, para argumentar a favor de la composición de su directorio preferido.

Las cosas no siempre fueron así. En 2019, el entonces director ejecutivo Bob Iger invitó al inversionista activista desde hace mucho tiempo a hablar ante la junta directiva de Disney. El verano pasado, Peltz almorzó en el Disneyland Resort en París con el reemplazo de Iger, Bob Chapek, y sus esposas.

La amistad se ha desvanecido. Peltz acumuló acciones en Disney a fines de 2022, acumulando finalmente una participación de $ 900 millones y comenzó a buscar cambios en la empresa. Trian era un importante accionista de Disney cuando Iger, de 71 años, fue recontratado como director ejecutivo en noviembre.

Los directores de Trian y Disney intentaron en silencio llegar a una distensión, pero no pudieron, dijeron ambas partes. En las presentaciones de esta semana, Peltz salió ganando. Ha luchado en varios concursos de apoderados a lo largo de su carrera, obteniendo acceso a directorios en compañías como Heinz y Procter & Gamble Co. También perdió, al no poder ingresar al directorio de DuPont.

Las principales críticas de Peltz a Disney se centran en su planificación fallida de sucesión, compensación "exagerada" y falta de disciplina de costos. Trian lanzó un sitio web, Restore the Magic , para transmitir sus puntos de vista, llamando a los problemas de Disney “autoinfligidos”.