Pese a incertidumbre y desaceleración, China sería la principal economía

Un informe del Bbva Research concluye que el nuevo mapa mundial tendrá a China como líder en 2045, pues la región que representará más de 50% del Producto Interno Bruto (PIB) del mundo de aquí a la vuelta de cinco años, mientras América del Norte se queda con una participación de 12,5% y Europa del Oeste de 7,2%

El fenómeno, que han descrito como ‘desplazamiento del centro de gravedad’, convertiría a esta economía en la más grande del mundo en un plazo de 20 años, seguida de países como India y Estados Unidos.

De acuerdo con Luis Fernando Ramírez, vicerrector de Investigaciones en la Universidad de La Salle, el factor poblacional será decisivo en esta transición: “India y China van a llegar a tener 40% de la población del mundo, solo eso los convierte en grandes consumidores”.

Más allá del tamaño del mercado en sí mismo, la dinámica se alcanzó luego de un cambio en el modelo económico que se dio hace unos años con el objetivo de apalancar la demanda doméstica. “Para fortalecer la capacidad de compra se mejoraron los salarios, en algunas ciudades hubo incrementos hasta de 40%”, recordó el experto.

Ramírez fue enfático en decir que mantener esa dinámica de consumo propio será, hacia el futuro, la mayor fortaleza del país que también ha venido haciendo la tarea de darle valor agregado a su industria para incrementar las exportaciones.

La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, aseguró a inicios de este mes que China ha emprendido un ambicioso “reequilibramiento” de su economía que la llevará a un crecimiento sostenible: “de la industria a los servicios, de las exportaciones al mercado interno, y de la inversión al consumo. También avanza hacia un sistema financiero más orientado al mercado”.

Sin embargo, a corto plazo el efecto es una desaceleración que rebota en otros países por la disminución de la demanda de materias primas y la contracción del comercio. Es por ello que las proyecciones del Banco Mundial le apuntan a que China cierre este año con un crecimiento de 6,7% en el PIB, pese a que en 2013 la variación fue de 7,7%. El FMI es menos optimista y prevé un incremento de 6,3%, según el informe Perspectivas de la Economía Mundial (WEO, por sus siglas en inglés).

Además de la contracción en el crecimiento (más drástica de la esperada), China debe asumir salidas de capital, bajas en mercados bursátiles y una caída en los precios de las materias primas (petróleo y metales). Es por ello que algunos expertos como Luis Armando Blanco dudan que en el corto plazo el desempeño sea tan destacable. “Hay indicadores muy destacados, pero otros que si no se fortalecen harán difícil volver a crecimientos anuales por encima de 8%”, concluyó.

Una economía que todavía no se refleja en la bolsa
De acuerdo con Luis Armando Blanco, experto en economía internacional, uno de los elementos a superar en China es la debilidad de las bolsas. El analista recordó que este año las autoridades se han visto obligadas a cerrar la jornada de forma anticipada por caídas en las cotizaciones. Más allá de las dificultades económicas, algunos expertos argumentan que esta volatilidad se explica en alzas ficticias y han descrito el mercado como “inflado”. La directora del FMI manifestó que estos comportamientos tienen efectos de contagios financieros. Tampoco se puede ignorar que el Gobierno ha decretado devaluaciones en el yuan, presionando el precio de los commodities.

Las opiniones

Luis Fernando Ramírez
Vicerrector de Investigaciones de la Universidad de La Salle
“Si bien la perspectiva de crecimiento económico es menor a la de hace unos años cuando superó  7%, una economía de este tamaño puede doblar su PIB cada 15 años”.

Luis Armando Blanco Cruz
Experto en Economía internacional
“Cinco años es un periodo muy corto para que China tenga un papel como el de  Estados Unidos. No es seguro que pueda ser la locomotora de reemplazo”.