Presidente de Senegal descarta candidatura para otro mandato en elecciones de 2024

El presidente de Senegal, Macky Sall, descartó buscar un tercer mandato en las elecciones presidenciales del próximo año, lo que puso fin a una acalorada controversia sobre su elegibilidad para presentarse.

La decisión de Sall de renunciar cuando termine su mandato en abril marca el comienzo de una carrera para suceder al líder de una de las economías de más rápido crecimiento de África. El candidato de la coalición gobernante Benno Bokk Yakaar tendrá ventaja en la votación prevista para febrero, ya que el popular líder opositor Ousmane Sonko se enfrenta a la descalificación de la carrera tras ser declarado culpable de “corrupción de jóvenes” y condenado a dos años de prisión.

“Quiero preservar mi dignidad y cumplir mi palabra”, dijo Sall, de 61 años, en un discurso televisado a la nación en la capital, Dakar, el lunes. “El mandato de 2019 fue mi segundo y último mandato, eso es lo que dije antes y esa es mi decisión esta noche”.

Si bien la constitución de Senegal limita a un presidente a cumplir dos mandatos consecutivos, Sall dijo anteriormente que una enmienda de 2016 le permitió postularse nuevamente, una afirmación que sus oponentes rechazaron. La coalición gobernante aún tiene que nominar un candidato presidencial.

Entre los candidatos para suceder a Sall se encuentra Idrissa Seck, finalista en las elecciones de 2019 en Senegal, quien renunció a su cargo en el gobierno en abril. Se espera que surjan otros retadores para agosto, cuando los candidatos deben presentar firmas de al menos el 0,8% de los votantes para demostrar que cuentan con el apoyo.

Otros dos candidatos potenciales, el exalcalde de Dakar Khalifa Sall y Karim Wade, hijo de un expresidente, podrían recuperar la elegibilidad para presentarse en 2024 después de que una comisión política designada por Sall dijera que estaba a favor de cambiar la ley electoral. Wade y Sall fueron descalificados de la votación de 2019 después de que recibieron sentencias de cárcel respectivamente por malversación de fondos y corrupción.

“Se dio cuenta de que enfrentará una tarea difícil para recuperar la presidencia”, dijo por teléfono desde Dakar Tochi Eni-Kalu, analista senior de África en Eurasia Group. “La mejor opción para él en este momento es ser un hacedor de reyes en lugar de optar por un tercer mandato”.

El inicio esperado de la producción de petróleo y gas en el cuarto trimestre podría impulsar la expansión económica de Senegal a 8,3% este año, la más rápida del continente después de Libia, según el Fondo Monetario Internacional. El prestamista con sede en Washington aprobó préstamos de $1.800 millones para el país el mes pasado para apoyar su recuperación y protegerlo de futuras conmociones.

Sall llegó al poder en 2012, aprovechando una ola de descontento popular después de que el entonces presidente Abdoulaye Wade buscara un tercer mandato inconstitucional.

“Seguiré dedicando todas mis fuerzas a defender las instituciones constitucionales de la república, el respeto a las decisiones judiciales, la integridad territorial, la protección de las personas y los bienes”, dijo Sall. “Me mantendré a su lado, escuchándolos, al servicio de la República y de la Nación”.