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Rishi Sunak, primer ministro de Reino Unido, recortó algunos planes de la agenda verde.
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Rishi Sunak dejó en manos de los consumidores la decisión de adquirir o no este tipo de vehículos en lo que fue un recorte en su plan de la agenda verde
El primer ministro Rishi Sunak diluyó partes clave de la agenda verde de su gobierno del Reino Unido, incluido retrasar cinco años hasta 2035 la prohibición de la venta de automóviles nuevos de gasolina y diésel, mientras establecía lo que llamó un “nuevo enfoque” para abordar el cambio climático.
“Al menos por ahora deberías ser tú, el consumidor, quien tome esa decisión, no el gobierno que te obligue a hacerlo”, dijo Sunak en un discurso en Downing Street el miércoles. Dijo que espera que la gran mayoría de los vehículos vendidos en el Reino Unido sean eléctricos para 2030 sin intervención del gobierno, debido a la caída de los costos.
Sunak dijo que todavía está comprometido a alcanzar el cero neto para 2050, pero dijo que el Reino Unido debería hacerlo de una “manera más proporcionada” que tenga en cuenta a los votantes que enfrentan la presión del costo de vida.
La declaración se presentó después de que su plan de cambio de sentido se filtrara a la BBC, lo que provocó una reacción violenta de algunos miembros de su Partido Conservador por temor a que dañara la posición internacional de Gran Bretaña y disuadiera a las empresas de invertir. El cambio también tomó por sorpresa a los miembros del gabinete, dijeron personas familiarizadas con el asunto, mientras Sunak exponía sus planes en una llamada telefónica el miércoles.
El Secretario de Asuntos Exteriores, James Cleverly, que representa al Reino Unido en la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York, donde la cumbre sobre la ambición climática del grupo está en la agenda, participó en la reunión. Dijo a los ministros que el Reino Unido todavía estaría por delante de otros países en materia de emisiones netas cero, aunque no tanto, según una persona familiarizada con la discusión.
Pero algunos miembros del equipo ministerial de Sunak están preocupados por la falta de claridad para los negocios, dijeron a Bloomberg dos personas familiarizadas con su forma de pensar.
"Nuestro negocio necesita tres cosas del gobierno del Reino Unido: ambición, compromiso y coherencia", dijo Lisa Brankin, presidenta de Ford Reino Unido, antes del discurso de Sunak. "Una relajación de aquí a 2030 socavaría los tres".
Stellantis, propietario de marcas como Vauxhall, Fiat, Citroen y Peugeot, dijo que está comprometido a lograr “ventas de automóviles y furgonetas nuevas 100% cero emisiones en el Reino Unido y Europa para 2030”, pero que se necesita “claridad” gubernamental.
Sunak dijo que quiere aliviar la carga financiera del cero neto para los británicos. Anunció un aumento del 50% en la financiación para instalar bombas de calor en los hogares, y las calderas de gas en los hogares existentes se eliminarán gradualmente a partir de 2035. Sólo será necesario reemplazarlas una vez que la caldera se rompa, dijo.
"No puede ser correcto que Westminster imponga costos tan significativos a los trabajadores", dijo Sunak. "Si continuamos por este camino, corremos el riesgo de perder el consentimiento del pueblo británico". Los críticos dijeron que los cambios no tendrían un impacto inmediato en los británicos en dificultades.
"Todas esas fechas están bastante alejadas del presente y esto no ayudará a nadie a gastar dinero ahora", dijo Adam Bell, director de políticas de la consultora Stonehaven y ex alto funcionario que trabaja en energía. "Sería un error impulsado por la política sobre la sustancia".
Diluir los compromisos ecológicos corre el riesgo de ampliar las divisiones conservadoras justo cuando el partido se prepara para su conferencia anual en Manchester el próximo mes. Adoptar una agenda verde ha sido durante mucho tiempo una política conservadora clave y ayudó al ex primer ministro Boris Johnson a estabilizar la reputación global de Gran Bretaña tras su exitosa campaña para abandonar la Unión Europea.
"La revolución industrial verde ya está generando enormes cantidades de empleos de alta calidad y ayudando a impulsar el crecimiento y elevar el nivel de nuestro país", dijo Johnson en un comunicado. "Es crucial que demos a esas empresas la confianza de que el gobierno todavía está comprometido con el cero neto y puede ver el camino a seguir".
Aún así, algunos conservadores acogieron con satisfacción el cambio de opinión de Sunak. La ministra del Interior, Suella Braverman, de la derecha política del partido, dijo a Times Radio que los cambios son buenos para los votantes que sufren los efectos de la inflación. "No vamos a salvar el planeta llevando a la quiebra al pueblo británico", afirmó.
El opositor Partido Laborista acusó a los conservadores de crear el caos. “Los conservadores podrían estar felices de darle una patada a la industria automotriz, pero los laboristas respaldarían al sector hasta el final”, dijo la portavoz de transporte del partido, Lou Haigh, en X, antes conocido como Twitter.
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