Relevo en la cúpula de la CNMV tras el nombramiento de Buenaventura como secretario

El nombramiento de Rodrigo Buenaventura como nuevo secretario general de losco (la organización mundial de las comisiones nacionales de los mercados de valores) abre definitivamente el proceso de relevo en la cúpula de la Cnmv, ya que hasta ahora existía la posibilidad de que el Gobierno prorrogara por dos años el actual mandato acogiéndose a lo dispuesto en la Ley del Mercado de Valores.

Precisamente la reforma de esta ley, mediante la que se decidió, entre otras cuestiones, ampliar los mandatos de los máximos responsables de la Cnmv desde los cuatro años, renovables, por uno de seis no renovable, ha sido una de las cuestiones que se han desarrollado durante el mandato de Buenaventura que finaliza el próximo 16 de diciembre.

Con carácter excepcional, y solo para esta ocasión, la nueva ley establecía que el Gobierno podía decidir ampliar el mandato del presidente y de la vicepresidenta, Montserrat Martínez Parera, por dos años adicionales a los cuatro para los que fueron nombrados.

Eliminada la posibilidad de esta alternativa, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, que ha estado informado de la posibilidad del nombramiento de Buenaventura en Iosco desde el primer momento y que lo ha apoyado de forma activa, tiene hasta el próximo 16 de diciembre para decidir qué persona sustituirá a Buenaventura y, eventualmente, a Martínez Parera.

La posibilidad de que esta última sea la elegida para la presidencia está encima de la mesa y ello supondría mantener lo ocurrido en las dos últimas ocasiones donde se ha puesto al frente de la institución a una persona vinculada a la misma y con experiencia suficientemente probada. Sebastián Albella, que presidió la Cnmv antes que Buenaventura, fue el primer secretario del consejo de la comisión, además de redactor de la ley de creación de la misma. Buenaventura ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en la Cnmv ocupando distintos puestos hasta ser nombrado presidente hace cuatro años.

Martínez Parera fue jefa de gabinete de Julio Segura y de Fernando Restoy, mientras estos fueron los máximos responsables de la comisión. Acompañó a Restoy cuando este fue nombrado subgobernador del Banco de España y regresó a la Cnmv hace ahora cuatro años.

Durante este periodo de tiempo, la Cnmv ha tenido que enfrentarse a distintos acontecimientos como la vuelta del Estado al accionariado de Indra; la decisión de cesar a su entonces presidente, Fernando Abril-Martorell (que había sido nombrado por el Gobierno del PP de Mariano Rajoy), y la rebelión de los consejeros independientes, lo que provocó una crisis institucional que, pasado el tiempo, ha superado la compañía bajo la presidencia de Marc Murtra.

La decisión de Ferrovial de empezar a cotizar en Amsterdam como paso previo para hacerlo en la Bolsa de Nueva York, argumentando que era más fácil hacerlo desde esa Bolsa que desde la española, fue otro de los acontecimientos que han tenido lugar en estos años.

La crisis de Grifols, derivada del informe desfavorable llevado a cabo por Gotham en el que se acusaba a la compañía española de haber alterado sus cuentas, ha terminado con la apertura de expedientes tanto a la firma española por defectos en la información financiera y en los informes de gestión y a la norteamericana por manipulación del mercado.

La crisis de Unicaja, derivada de la lucha por el poder desatada tras la fusión de esta entidad con Liberbank, aunque fue pilotada tanto por el Ministerio de Economía, al tener la tutela de la Fundación Unicaja principal accionista del banco, y por el Banco de España y el Banco Central Europeo, también tuvo su repercusión en el quehacer de la Cnmv al tratarse de una entidad cotizada.

La aparición de las criptomonedas y su rápido desarrollo comercial por empresas no reguladas obligó a la Cnmv a redactar una guía para controlar la publicidad de su comercialización.

La Cnmv autorizó la oferta parcial de compra de acciones del fondo australiano IFM sobre Naturgy, que dio inicio a un largo proceso no concluido todavía de clarificación del accionariado de la compañía energética y que provocó, además, que el Gobierno estableciera unas condiciones duras al nuevo accionista minoritario (mantener la sede en España, defender la política de dividendos y no favorecer la venta de determinados activos...). Esas condiciones se han trasladado también a BlackRock, convertido en una accionista relevante de la compañía al haber adquirido el fondo GIP, que tiene algo más del 20% del capital y al que hay que sumar las acciones que BlackRock ya tenía (2%). La concentración accionarial en Naturgy es tan elevada (cuatro accionistas tienen cerca del 90% del capital) hace que la liquidez en Bolsa sea reducida. BlackRock y CVC (que también tiene el 20%) querrían abandonar la sociedad, pero no se encuentra comprador para esos paquetes.

La vuelta del Estado a Telefónica a través de Sepi para, junto con el aumento de la participación de Criteria en la compañía, para hacer frente a la decisión del fondo saudí STC de hacerse con el 10% del capital de la operadora de telecomunicaciones española, ha sido otra de las cuestiones a las que se ha enfrentado la Cvmv en los últimos meses. El Estado ha vuelto al consejo de la compañía.

Buenaventura permanecerá en la presidencia de la Cnmv hasta el próximo 16 de diciembre cuando le vence su mandato y es posible que antes de esa fecha la comisión registre el folleto de la opa que BBVA quiere lanzar sobre el capital de Sabadell, que cuenta con la oposición del consejo del banco de origen catalán. La próxima semana la Cnmc debe decidir si aprueba la operación en lo que se denomina fase uno y entonces la Cnmv podría registrar el folleto antes de mediados de diciembre si está finalizado. Si la Cnmc decidiera pasar a fase dos, el plazo para autorizar la operación se prolongaría varios meses más y entonces la Cnmv deberá decidir si espera a ese momento o si aprueba el folleto sin conocer la condiciones que la Cnmv pudiera acabar poniendo a la operación. Algo inusual, pero posible. Si decidiera esperar sería algo que debería adoptar el consejo de la Cnmv bajo la nueva presidencia.