Río de Janeiro, Belo Horizonte y Bogotá tienen el tráfico más lento de la región

Río de Janeiro, Belo Horizonte y Bogotá son las ciudades suramericanas en las que, en promedio, las personas se demoran más transportándose de un lugar a otro.

Estos centros urbanos ocupan los tres primeros lugares en el índice de tráfico por tiempo para ciudades de América del Sur, el cual es construido por Numbeo, la base de datos que contiene información sobre ciudades y países.

Este índice es un promedio del tiempo necesario, en minutos, para transportarse en un trayecto del lugar de residencia al de trabajo o al de estudio. Los datos son aportados por los usuarios de Numbeo, quienes, por medio de una encuesta, ingresan a la base cuánto tiempo les toma movilizarse en sus respectivas ciudades y en cuáles transportes.

Las distancias varían en los perfiles de cada ciudad, ya que la base de datos las promedia según la cantidad de kilómetros en la que es más probable que los ciudadanos hagan uso de cierto medio de transporte.

Igualmente, estos medios varían en los perfiles de cada ciudad, pues no todas tienen las mismas opciones. Según el índice actualizado hasta enero de este año, en Río de Janeiro a una persona le toma en promedio 54,6 minutos transportarse de su casa al trabajo o al colegio.

Para una distancia de 16,32 kilómetros, que es el promedio de la ciudad para que las personas se movilicen en bus, este trayecto al usar este medio de transporte es en promedio 44,5 minutos.

Para una distancia de 21,69 kilómetros, que es el promedio para las personas que utilicen el carro, se emplean 55 minutos en este medio de transporte.

Para José Stalin Rojas, director del Observatorio de Movilidad de la Universidad Nacional, este tiempo tan largo en los desplazamientos afecta la productividad laboral y la calidad de vida.

“Si en cada trayecto nos demoramos una hora, a la semana pasamos por lo menos un día laboral dentro del sistema de transporte. Esto nos agota y nos quita tiempo de recreación”, señaló.

En Belo Horizonte, una persona gasta en promedio 52,3 minutos desplazándose de su vivienda al trabajo o al sitio donde estudia. En esta ciudad, el promedio de la distancia para que las personas se muevan en bus es de 11,73 kilómetros y el tiempo promedio que gastan en este recorrido haciendo uso de este medio de transporte, según Numbeo, es de 46,43 minutos.

Para transportarse en moto, el sitio al que se dirige la persona debe estar en promedio a 12 kilómetros de distancia y en promedio se demora 25 minutos en llegar. El promedio de la distancia para usar el carro en Belo Horizonte es de 19 kilómetros y cuando las personas hacen este recorrido en este medio de transporte, tardan 51,6 minutos en promedio según los registros.

En el caso de la capital de Colombia, en promedio, las personas se demoran 49,5 minutos desplazándose de su lugar de residencia al sitio en el que laboran o estudian.

De acuerdo con María Luisa Flechas, exsecretaria de Movilidad, en este enfoque se debe tener en la cuenta que personas que trabajan en Bogotá han preferido mudarse a municipios aledaños, porque los precios de vivienda son bajos.

Según las estadísticas de Numbeo, en promedio, en Bogotá las personas se transportan en bus cuando recorren distancias de 13,08 kilómetros, que en promedio les toman 42,8 minutos en este medio de transporte.

“Estos resultados reflejan que el sistema de transporte público no es eficiente y su infraestructura no permite mejorar los tiempos de manera sustancial”, expresó Rojas, quien agregó que a corto plazo no hay una solución y que habría que esperar al metro.

Para una distancia promedio de 20,47 kilómetros, en Bogotá se transportan en moto. Este recorrido toma, en promedio, 55 minutos. Por último, cuando la distancia promedio a la que se dirigen es 15,56 kilómetros, las personas en Bogotá utilizan el carro, con el que se demoran en promedio 41,6 minutos en llegar.

Para Flechas, si se quieren mejorar los tiempos de viaje es necesario trabajar en dos temas. Uno es cómo se localizan las actividades y el otro es la gestión del tráfico.

“El ordenamiento territorial y los usos del suelo deben reorganizarse e incentivar el uso de la mezcla de usos, es decir que en una misma zona haya vivienda, oficinas y colegios”, dijo la exfuncionaria.

Según la exsecretaria esta opción acorta distancias, porque las personas viven cerca de donde realizan sus actividades. Además es una medida sostenible en el tiempo.

En cuanto a la gestión de tráfico, Flechas señala que se debe hacer uso de la tecnología para coordinar las vías.

“Existen semáforos inteligentes que controlan el tráfico de acuerdo con las horas y los días. En este tema es en lo que la ciudad está más atrasada”, puntualizó la experta.

Por último, Rojas cree que la movilidad necesita tanto de la administración pública como de los ciudadanos.

“No solo se necesita inversión en el transporte por parte de la Alcaldía, sino que las personas también deben respetar las normas de tránsito y el espacio público”, concluyó.

Mejoras en la educación vial y en el transporte
Estas ciudades han empezado a implementar tecnología y programas para mejorar su movilidad y la manera como las personas se relacionan en las vías. En Río de Janeiro se puso en marcha la campaña de educación vial “No hagas en el tránsito lo que usted no quisiera que hicieran con usted”, con el que se espera que si las personas cumplen con las normas de tránsito, mejore la movilidad. En cuanto a Bogotá, a finales del año pasado adjudicó una licitación para modernizar los semáforos de la ciudad, lo que permitiría ahorrar tiempo.