Suministro de gasolina de Nueva York está en riesgo, ya reservas alcanzan los mínimo

El costo mayorista de la gasolina en Nueva York aumentó más de 40% frente a los futuros después de que los suministros regionales se hundieron al nivel más bajo en una década, lo que aumentó el riesgo de escasez.

Las reservas de gasolina en la región central de la costa este se encuentran en el nivel absoluto más bajo desde noviembre de 2012, según datos de la Administración de Información de Energía. Estacionalmente, los suministros están cerca de un mínimo histórico en registros que se remontan a 1993. La prima de la gasolina de Nueva York en el mercado al contado, donde se determinan los precios al por mayor, aumentó 10 centavos el miércoles. Solo San Francisco tiene gasolina mayorista más cara.

Los bajos suministros de gasolina en la región pueden tener un impacto global descomunal porque el puerto de Nueva York alberga entregas físicas de contratos de futuros que sustentan los flujos comerciales en todo el mundo. Un camión cisterna de combustible que se traslada de India a Brasil, por ejemplo, probablemente tenga un precio de referencia con respecto al índice de referencia de futuros de Nueva York. Por lo tanto, la escasez en esta región clave que hace que los precios se disparen también afectaría los precios en otros lugares.

La oferta se ha reducido en medio de un repunte de la demanda, una caída en las importaciones europeas de gasolina y continuos desvíos de carga fuera de la región. Esto compensó los esfuerzos de producción de las refinerías de la costa este, todas ellas en la región del Atlántico central, que operaron a 100,4% de la capacidad nominal la semana pasada, la más alta registrada.

Las ventas de combustible de las gasolineras han aumentado en las últimas semanas, según datos de la agencia de informes de precios Opis y el rastreador minorista Gasbuddy. La cifra de demanda implícita de la EIA ha sido más volátil de lo habitual en las últimas semanas, según el análisis de BloombergNEF, pero el último salto semanal debería ayudar a impulsar aún más los volúmenes minoristas.

El suministro de diésel también sigue siendo grave, con reservas de destilados estacionales languideciendo en el nivel más bajo desde marzo en registros que se remontan a 1993. La escasez comenzará a sentirse cuando cambie el clima. El noreste de EE. UU. es la única región del país donde la mayor parte de la calefacción doméstica y comercial proviene de la quema de combustible.