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Telecomunicaciones, retail y energías verdes tendrán los mayores impulsos en 2025, la demanda de energías convencionales caerá
A poco más de un mes de que se acabe el año, ya hay proyecciones de cómo le irá a distintos sectores e industrias y los retos que traerá el año nuevo.
Uno de los primeros en lanzar sus previsiones es The Economist y su unidad de inteligencia, Economist Intelligence Unit. El panorama demuestra una desaceleración en la demanda de la energía, mientras se fortalece la inversión en energías verdes; un mayor dinamismo tanto en el sector de retail como en el automotriz y una mayor penetración de avances tecnológicos como el internet satelital por cantidad de países.
El próximo año representará un crecimiento mayor en el uso de internet satelital, que se apalancará de Starlink principalmente (empresa de Elon Musk, el mayor beneficiado con la victoria de Donald Trump). Sin embargo, el servicio Kuiper de Amazon aparecerá como un competidor en este segmento. “Más países empezarán a usar internet satelital aunque se inclinará y estará limitado a fines militares y marítimos”, agrega The Economist.
En cuanto a las inversiones en inteligencia artificial, la revista cree que ésta seguirá creciendo a medida que la demanda de chips semiconductores también crezca; y añaden que Nvidia y Tsmc seguirán liderando este mercado.
Según el informe, se reducirá el aumento del consumo energético mundial en 1,6% en 2025. La caída se relaciona con el uso de fuentes convencionales el carbón y, a pesar de que la demanda de petróleo y gas seguirá estable, las mayores ganadoras serán la energía eólica y solar.
Sobre el petróleo, se espera que la volatilidad en los precios se mantenga mientras que el conflicto en Medio Oriente siga. El temor por una escalada de violencia en Irán haría tambalear aún más la oferta de crudo en 2025. En cuanto al gas, los precios seguirán cayendo en Europa y Asia mientras la oferta eléctrica se fortalezca.
En cuanto a las proyecciones del sector financiero, los analistas consideran que la relajación de la política monetaria de los principales Emisores del mundo de 2024 y 2025 repercutirá en menores márgenes de ganancias de los bancos que históricamente se apoyaron en depósitos y préstamos para su rentabilidad.
Las previsiones sobre la venta de vehículos nuevos son optimistas. Se espera un récord de 97,2 millones de nuevos carros; el segmento de eléctricos también alcanzará un récord de ventas con 19,4 millones, 16,3% mayor que en 2024.
A pesar de que la mayoría de los países ya no ofrece los mismos incentivos para los ciudadanos para la compra de vehículos eléctricos, las propuestas de transición energética aún hacen posibles estímulos para “fabricantes europeos y asiáticos como Volvo y Geely”.
Con las expectativas de que la inflación mundial se siga desacelerando, y consigo traiga una mayor confianza en el consumidor, se espera que el volumen global de ventas del retail tenga su mayor impulso desde 2021 con un incremento de 2,2%.
La región que liderará la recuperación del sector será Asia, liderado por India y no por China (afectada por un mercado laboral débil, confinamientos prolongados y la caída del sector inmobiliario).
Dentro de los segmentos a vigilar en 2025, resalta al sector de alimentos (en especial comida rápida) por la imposición de medidas para disminuir los problemas de obesidad de países tanto de Europa como del sudeste asiático.
Mientras que en Inglaterra y Noruega se esperan prohibiciones para la publicidad de ‘comida chatarra’ en el horario televisivo de la noche, en Eslovaquia y Vietnam impondrán nuevos tributos a las bebidas azucaradas. Las medidas repercutirán en menores ventas de los representantes del segmento el próximo año.
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