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Además de sumar delegados demócratas, la vicepresidenta apareció con una intención de voto de 45% frente a 47% de Trump
El impacto de la decisión de Joe Biden de bajar su candidatura a la reelección y apoyar a Kamala Harris como su heredera a la presidencia tuvo un impacto inmediato en la carrera, medido en contribuciones de campaña, mercados de predicción y apoyos.
Los próximos días dirán si las encuestas seguirán el ejemplo. Un primer indicio es un sondeo nacional de Morning Consult -el primer dato importante desde el anuncio de Biden el domingo- que ubica a la vicepresidenta dos puntos porcentuales por detrás del exmandatario Donald Trump, 47% a 45%, dentro del margen de error.
Es una mejora respecto a la diferencia de seis puntos que tenía Biden antes de abandonar la carrera. Hay motivos para creer que poner el nombre de Harris en la papeleta podría ayudar a los demócratas. Según algunas encuestas, a la vicepresidenta le iría mejor que a Biden en enfrentamientos directos contra Trump.
Durante meses, los sondeos sobre un enfrentamiento alternativo entre Harris y Trump mostraban que su desempeño era inferior al de Biden por varios puntos porcentuales. Entre ellos, la encuesta Bloomberg News/Morning Consult de los estados en disputa, que ubicaban a Harris por detrás de Trump por siete puntos porcentuales, frente a cuatro de Biden.
Esta dinámica empezó a cambiar tras la actuación de Biden en el debate de CNN y a principios de julio Harris obtenía mejores resultados que Biden en enfrentamientos cara a cara contra Trump: 1,6 puntos porcentuales mejor en el promedio de RealClearPolitics el domingo.
Harris selló su condición de candidata virtual el lunes por la noche tras superar la cifra de 1.976 delegados comprometidos, según un recuento no oficial de Associated Press. Si bien los delegados que indicaron su apoyo no están obligados a respaldar su nominación, el logro (y la falta de una oposición creíble) subraya el control de la vicepresidenta sobre la fórmula demócrata.
Harris rápidamente obtuvo el apoyo de expresidentes como Bill Clinton y expresidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi. Obtuvo el apoyo de gobernadores demócratas que se rumoreaban que serían posibles candidatos: Gavin Newsom de California, J.B. Pritzker de Illinois y Gretchen Whitmer de Michigan.
Harris también se benefició del entusiasmo de los donantes, recaudando un récord de US$81 millones en las primeras 24 horas después de anunciar su candidatura y este miércoles estaría arriba de US$100 millones.
De acuerdo por un sondeo realizado por Associated Press sobre los estados que tendrían más delegados para respaldar la candidatura de Harris, California y Nueva York lideran en este sentido con 496 y 300 cada uno. Tanto California como Nueva York ya anunciaron su apoyo unánime a la actual vicepresidenta; por su parte, en Texas se celebrará una ronda de votación para definir a la candidata del partido demócrata.
En caso de que en la primera ronda no se alcance la mayoría necesaria, se celebrarán otras rondas hasta definir al candidato.
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