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Macron organizó la reunión entre Trump y Zelenski, mientras los líderes se reunían para la reapertura de la catedral de Notre Dame
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, dijo que planteó el riesgo de un conflicto congelado con Rusia y presionó para garantías de seguridad en las conversaciones con el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente francés, Emmanuel Macron.
Zelenski dijo que buscaba dejar en claro su posición de que Ucrania sólo puede entablar conversaciones de alto el fuego desde una posición de fuerza, y dijo a los líderes en París el sábado que el presidente ruso, Vladimir Putin, no quiere poner fin a la guerra.
“Nadie quiere terminar la guerra más que nosotros”, dijo Zelenski a los periodistas en Kiev el lunes, al tiempo que opinaba sobre la posibilidad de inducir a Putin a dar marcha atrás. “Tenemos que obligarlo; uno puede obligarlo sólo si Ucrania es fuerte”, dijo, refiriéndose a un ejército robusto y la capacidad de lanzar ataques de largo alcance.
Macron organizó la reunión entre Trump y Zelenski en la capital francesa, mientras los líderes se reunían para la reapertura de la catedral de Notre Dame. El ucraniano ha hecho propuestas al presidente electo, que se ha mostrado escéptico sobre el apoyo sostenido a Kiev, y ha pedido un rápido fin de la guerra.
Zelenski y los gobiernos europeos han insistido en que no se puede imponer a Kiev ninguna solución al conflicto. Reiteró que Ucrania necesita garantías de seguridad para evitar un futuro ataque ruso y subrayó su objetivo de recibir una invitación para unirse a la Organización del Tratado del Atlántico Norte.
“No podemos estar en la Otan ahora, pero podría haber una invitación para unirse a la Otan”, dijo, y agregó que planea llamar al presidente estadounidense Joe Biden para presionarlo. “Eso es lo que discutimos”.
Zelenski ha estado presionando a los aliados occidentales para que acepten la propuesta de Ucrania de unirse a la Otan para evitar otro ataque ruso después de que termine la guerra actual. También planteó una propuesta, que ya había lanzado Macron, de una presencia militar occidental en Ucrania para apoyar a Kiev.
Aunque la propuesta no ha logrado reunir el apoyo de los líderes europeos, el presidente ucraniano dijo que podría volver a la mesa como una forma de proteger a su país después de que termine la guerra, pero antes de que pueda unirse al bloque militar de 32 miembros.
“Podemos pensar y trabajar sobre la propuesta de Emmanuel: él sugirió que algunas tropas de algunos países estén presentes en algunas partes del territorio ucraniano para garantizar nuestra seguridad mientras Ucrania no esté en la Otan”, dijo Zelenski.
"Pero tendremos que tener un entendimiento claro de cuándo Ucrania va a estar en la UE y cuándo va a unirse a la Otan", añadió.
Zelenski habló junto al líder de la oposición conservadora alemana, Friedrich Merz, que buscará hacerse cargo de la cancillería del país tras unas elecciones anticipadas en febrero. Los dos hablaron sobre la creación de un grupo de contacto de naciones europeas para coordinar una posición con Estados Unidos.
El grupo, integrado por Alemania, Polonia, Francia y el Reino Unido, “reunirá a estos cuatro grandes países para desarrollar una posición común con Estados Unidos”, dijo Merz. Dinamarca también podría sumarse, en representación de las naciones nórdicas, dijo Zelenski.
Merz también resaltó su disposición a enviar misiles alemanes de largo alcance Taurus. “Debemos hacer todo lo posible para que Ucrania pueda ejercer su derecho a la legítima defensa, sin restricciones”, afirmó.
En una reunión separada con el primer ministro de Estonia, Kristen Michal, Zelenski dijo que Ucrania quiere unirse a la Fuerza Expedicionaria Conjunta liderada por el Reino Unido, una asociación militar multinacional.
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