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Cómo les ha pegado la inflación a las consolas
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Aunque estos aparatos se mantienen vigentes, a pesar del encarecimiento, varios dispositivos viejos serían más costosos que los modernos
Las consolas de videojuegos son uno de los dispositivos de entretenimiento que más ha marcado a las generaciones jóvenes, y aunque llevan casi medio siglo en el mercado, más de uno de los usuarios no se imagina cuánto costarían esos dispositivos si se hubieran lanzado en la actualidad.
Eso no quiere decir que los últimos lanzamientos sean baratos, solo para tomar una referencia, la más reciente consola que salió al mercado es el PlayStation 5 PRO, que tiene un precio de US$699.
Aunque parezca costoso, el portal Inflation Station recopiló el listado de cuánto costaban las consolas el año que salieron, y le ajustó su precio a lo que valdrían en la actualidad, tomando en cuenta la inflación, mostrando que muchos de estos aparatos hoy en día serían más caros, incluso que los dispositivos de última generación.
El “decano” de las consolas puede decirse que es Atari, y su primer gran lanzamiento se hizo en 1977, cuando presentó su Atari 2600. En ese momento, el dispositivo salió al mercado con un precio de US$199. Pero, si se ajustara con la inflación actual, este aparato tendría un valor de US$1.020.
Pensando en el mercado colombiano, tal vez la primera empresa que marcó a los usuarios de videojuegos fue Nintendo, y una de sus primeras consolas, NES, se lanzó en 1985, y se presentó al mercado con un precio de US$199. Haciendo el ajuste a las referencias actuales, esta consola valdría US$576.
Nintendo marcó el mercado de los videojuegos por ser los primeros en apostarle a las consolas portátiles, y el GameBoy presentado en 1989 fue el primer gran desafío. Con un precio de US$89, actualmente este aparato costaría US$225.
Otra marca que no podría faltar es Microsoft. Su consola Xbox se lanzó en 2001 con un precio de US$299, pero en la actualidad costaría US$531.
Al igual que el PlayStation, con esa referencia, podría tener un precio similar, o incluso mayor al del último lanzamiento de la compañía estadounidense.
En 2020 se presentaron la Xbox Series X y S, la primera con un precio de US$499 y la segunda costaba US$299. Actualmente, costarían US$604 y US$362 respectivamente. Contrastándolo con la primera generación de Xbox, los precios son similares o superiores.
Aunque el precio es un factor preponderante a la hora de comprar una consola de videojuegos, estos aparatos han optado por ofrecer una gama amplia de servicios a sus usuarios.
Disfrutar plataformas de streaming para ver películas, escuchar música, entre otras funcionalidades, son las que seducen a los compradores.
Leonardo Ortegón, doctor en marketing y docente del Politécnico Grancolombiano, señaló que los videojuegos se posicionaron en Colombia, entre otros factores, porque habilitaron un nuevo medio para que las personas compartieran espacios, incluso para que disfrutaran de experiencia así sea a distancia.
“Sin embargo, los precios en Colombia son más altos que en otros países debido a impuestos y costos de importación. Aunque esto puede ser una barrera, muchas tiendas han ofrecido facilidades como pagos en cuotas para hacerlas más accesibles. Si se lograran reducir los precios o implementar incentivos fiscales, sería más fácil para muchas personas disfrutar de esta experiencia de entretenimiento”, declaró el experto.
“Los precios en Colombia son más altos que en otros países debido a impuestos y costos de importación. No obstante, muchos han ofrecido facilidades de pagos para hacerlas más accesibles”.
Estas consolas también han abierto un segmento en la industria, conocido como gaming, que cautiva a los jóvenes, sobre todo porque se abren competencias de ciertos juegos, y resultan lucrativas, algo que han aprovechado otras marcas.
No solo las tradicionales consolas de videojuegos están seduciendo a los jugadores, los smartphones también se han ganado un espacio entre estos usuarios, y ofrecen teléfonos diseñados para gamers.
Esto ha generado una especie de competencia, pues esos dispositivos ofrecen experiencias similares, por un precio semejante, por lo que muchos optan por comprar celulares y no consolas. Algunas marcas, como Xbox, ya están pensando en modelos que no dependan de aparatos físicos, sino que los jugadores accedan a los juegos mediante streaming.
