Los riesgos que corre si no llega a leer los términos y condiciones de las plataformas

La nueva temporada de Black Mirror dio cuenta de uno de los riesgos (rayando la ficción) que podríamos someternos al no leer en su totalidad el texto previo de los términos y condiciones de todas (o casi todas) las plataformas web. El peligro en este caso fue que la protagonista no leyó un apartado que decía que una plataforma de streaming habría dado el aval a un computador que utilizaba inteligencia artificial para acceder a su vida privada, y hacer una serie con los insumos.

Aunque no son riesgos de este nivel, al omitir en su totalidad la lectura de estos términos y condiciones, se podrían generar algunas situaciones que pueden poner en riesgo el uso y manejo de los datos personales y del alcance de las mismas empresas con este tipo de información.

Usualmente la letra pequeña de las compañías que comercializan sus bienes o servicios por internet, contienen los siguientes puntos por considerar respecto de la protección de datos personales: (i) uso de cookies; y (ii) mecanismo para ejercer los derechos de los titulares de la información. Sobre esto, Sarita Enríquez, abogada asociada de Posse Herrera Ruiz, explica que al no leer en su totalidad todos los términos y condiciones, los usuarios se exponen a dos tipos de problemas.

“En la política de privacidad se incluye lo relacionado a los derechos de los titulares (artículo 8 ley 1581 de 2012) y los mecanismos para ejercer los mismos, así como las finalidades del tratamiento, es decir, lo que puede hacer el responsable del tratamiento sobre la información. Desconocer lo anterior permitiría que (i) el responsable realice un tratamiento no deseado por el titular; y (ii) en caso de que el titular desee elevar una consulta y/o reclamo respecto del tratamiento, el titular podría desconocer a las garantías que tiene por ministerio de ley”, dice Enríquez

¿Qué son las ‘cookies’?

Las ‘cookies’ son pequeños archivos que se almacenan en los dispositivos de los usuarios para acumular información sobre sus preferencias y gustos al momento de navegar. Usualmente, las compañías presentan las cookies a través de pequeños avisos que la mayoría de los usuarios aceptan y autorizan, sin entrar en detalle respecto de su alcance. Una vez aceptadas, el productor y/o proveedor de servicios puede almacenar información de los usuarios y tratar la misma para estrategias de marketing.

Por otro lado, de conformidad con el Decreto 1377 de 2013, toda compañía que recolecte almacene y use datos personales está obligada a adoptar una política de privacidad, en la cual se debe informar a los titulares sobre el tratamiento de sus datos personales.

Stella Sofia Vanegas, socia fundadora de VMC Consultores y profesora de la Universidad Javeriana en Datos Personales, dice que los términos y condiciones no es lo mismo que la Política de Privacidad.

Según ella, los términos y condiciones están previstos para informar al consumidor acerca de las condiciones en que debe navegar en el sitio web, las reglas establecidas para ello y, muy importante, los derechos que tiene respecto de la adquisición del producto o servicio allí ofertado.

“Es importante precisar que términos y condiciones no es lo mismo que la Política de Privacidad, ambos términos se suelen confundir y la verdad es que son diferentes, pero claramente complementarios. La Política de Privacidad establece los términos en los que las empresas o entidades procesadoras de datos personales hacen el tratamiento de los datos personales que han de conocer en desarrollo de su objeto social y expresan los derechos que les competen a los titulares y la forma de hacerlos valer ante las entidades Responsables y Encargadas del tratamiento de sus datos”, concluye.

Vanegas asegura que una de las trabas de los términos y condiciones es que muchas veces viene en un lenguaje muy técnico, por lo que se hace difícil su comprensión.