Con 10 nominaciones para Roma, Netflix ahora pide pista en los Oscar

“Netflix sabe que su trabajo se debe enfocar en el contenido de calidad”, esto dijo Reed Hastings, CEO del gigante de streaming en 2015 cuando anunció inversiones millonarias para producciones propias, con las que según él, le daría “un toque de exclusividad a los usuarios”.

El plan se tradujo en más de 100 títulos entre series y películas que poco a poco fueron ganando protagonismo para competir con los grandes de la industria. Por ejemplo, el año pasado esto se vio en el Festival de Cannes cuando la selección oficial no aceptó contenido de Netflix, y este respondió con la eliminación de las cintas nominadas que tenía en su parrilla.

Ahora, con más fuerza se sintió con la cinta Roma, (contenido original de Netflix), arrasó con nominaciones para los Premios Oscar al ser candidata en 10 categorías; entre otras cosas, algo que nunca había logrado una película latina, teniendo en cuenta su elenco y su director (ya ganador de un Oscar), el mexicano Alfonso Cuarón.

Además de querer quedar como Mejor Película Extranjera, la cinta que narra cómo era la vida de los trabajadores domésticos en el México de los años 70, se enfrentará en uno de los escenarios más disputados, el de Mejor Película.

Allí, llama la atención que con un presupuesto de US$15 millones, se encuentre con otras películas de gran calibre como las blockbuster del año, (los taquillazos de 2018), Pantera Negra, que requirió de US$200 millones para su realización y solo en Colombia movió a 2,2 millones de espectadores; y Bohemian Rhapsody, con un presupuesto de US$42,4 millones, y 1,5 millones de boletas vendidas a nivel nacional.

Nicolás Torres, artista visual aseguró que “Roma es la muestra del buen desarrollo que ha tenido la cinematografía mexicana y de que Netflix puede tener contenidos de calidad”.

Asimismo, pronosticó que esta producción no solo conseguirá el título de mejor película extranjera, también será una de las que más galardones se lleve.

En los últimos cuatro años los productos Latinoamericanos, sobre todo los de origen mexicano, se han sabido mover entre lo conceptual y lo comercial demostrándole a todos su fortalecimiento. Este será recordado como un golpe para quienes subestimaron las plataformas digitales como Netflix al decir que no presentaban productos buenos.