Conozca cómo incorporar la tendencia del "lujo tranquilo" a su atuendo de oficina

Aunque el concepto de "lujo discreto" puede ser objeto de artículos de opinión y de un fuerte aumento de las búsquedas en Google, no se trata de una mera tendencia en ropa. Se trata de un término de reciente acuñación que designa un estilo adoptado desde hace tiempo por personas de alto poder adquisitivo que visten con discreción marcas de diseño, evitando los logotipos en favor de detalles sutiles y de primera calidad que hablan más de quien los lleva.

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Gracias a la televisión de prestigio como Succession (en la que el personaje de Kendall Roy lucía un gorro negro de cachemira de Loro Piana de US$525) y a la televisión como el juicio por accidente de esquí de Gwyneth Paltrow, vorazmente diseccionado (y su abrigo de lana verde de US$5.445 de The Row), cada vez se habla más de adherirse a un atuendo llamativamente discreto.Y aunque las tendencias de estilo Barbiecore y Mermaidcore, de inspiración cinematográfica, dominan ahora los titulares, y Succession y su dosis semanal de riqueza sigilosa han llegado a su fin, el lujo discreto ha llegado para quedarse, y va a cambiar nuestra forma de vestir en el trabajo en los próximos años.

En la oficina, dicen los estilistas, el lujo discreto puede ser un código que separe los niveles de gusto y éxito. Esto se manifiesta en un puño de camisa con un dobladillo perfecto que sobresale de la manga del traje lo justo para permitir que se deslice un reloj de alta calidad. Es un discreto zapato de vestir confeccionado con el mejor material, o la superposición de tejidos naturales en tonos neutros desde la corbata hasta la americana y el abrigo.

Y sí, es caro.

Vestir con un lujo discreto no es sólo ir bien al trabajo. El lujo discreto consiste en lucir bien en el trabajo con prendas de lujo de marcas de primer nivel, pero sin caer en la ostentación. Por eso es aún más importante elegir las prendas adecuadas.

"La regla general es alejarse de los grandes logotipos de diseñadores, así como de las prendas ostentosas o de moda", dice el estilista de imagen Mohar Chaudhuri. Pero dado que el lujo discreto es cuestión de detalles, puede ser útil contar con directrices específicas que le ayuden a integrar esa visión del mundo en su vestuario de trabajo.

Piense en una inversión a largo plazo

"La moda de lujo discreto significa invertir en prendas atemporales, discretas pero significativas, de calidad artesanal superior", afirma Eric Owes, estilista de vestuario de famosos afincado en Los Ángeles que ha trabajado con Drake y Mick Jagger. Owes insiste en que el refinamiento no tiene por qué ser aburrido.

"Jil Sander tiene sus raíces en un compromiso con el minimalismo de los 90", dice a modo de ejemplo, nada que esto "haya permitido a la marca resistir el paso del tiempo". La camisa de corte recto de manga larga de US$1.300 o el pantalón recto slim fit de US$890 de la marca funcionarían en casi cualquier oficina.

Debido a los elevados costes asociados al lujo discreto, hay un énfasis implícito en la calidad por encima de la cantidad.

"Elige prendas que puedas llevar durante muchos años. Pueden ser piezas llamativas o minimalistas", dice el estilista Nicholas MacKinnon, que ha trabajado con Jake Lacy, estrella de The White Lotus, el actor Joshua Bassett y la cantautora Maggie Rogers.

Otros favoritos de Owes son Bottega Veneta y los artículos de piel tejida que aparecen en su recién estrenado vídeo Craft in Motion, así como Fear of God, una línea con sede en Los Ángeles fundada por Jerry Lorenzo que es conocida por sus básicos elevados, como unos leggings de mujer de US$85 y un polo de hombre de punto elástico de US$120, ambos de color negro.

Restrinja su paleta de colores

"Elige colores apagados o monocromáticos, combinados con cortes limpios", aconseja Chaudhuri.

En última instancia, el lujo discreto consiste en pasar desapercibido, o en ser reconocido sólo por aquellos que pueden acceder a las mismas alturas de estilo y hablar el mismo lenguaje exclusivo. Por supuesto, requiere buen gusto y una mirada hacia la intemporalidad. Pero también es prestar atención a los indicadores sensoriales, desde el suave abrazo de la cachemira hasta el movimiento de un traje chaqueta que se ajusta a la perfección.

Chaudhuri suele recurrir a la marca de moda italiana Brunello Cucinelli y sus codiciados artículos de cachemira. Mucha gente -aunque no lo sepa- ha visto las camisetas de Brunello Cucinelli, de US$470 y algodón y cuello burlón, una elección popular entre varios directores ejecutivos de empresas tecnológicas. La estilista también recomienda a la diseñadora neoyorquina Nili Lotan y sus suaves colecciones de sarga de algodón cepillado. Para la oficina, las camisas oversize de popelín de Nili Lotan (US$350) podrían integrarse fácilmente en un armario semanal.

Otra marca favorita: Celine, pero en concreto piezas vintage de cuando Phoebe Philo era directora creativa de la maison, entre 2008 y 2018, como un vestido negro hasta la rodilla (US$625).

"Elige tonos neutros, como beige, topo, gris, crema, negro y blanco. Evita los estampados llamativos o las piezas demasiado adornadas", añade Owes. "En su lugar, opta por siluetas sencillas con detalles sutiles, como pliegues, fruncidos, texturas de tejidos inesperados y drapeados".

Confección y ajuste

"Las prendas sencillas pueden ser las más difíciles de llevar, así que tómate tu tiempo para que te las hagan a medida", dice MacKinnon.

Trabajar con una marca que ofrezca prendas a medida -o simplemente encontrar un sastre de confianza- suele hacer que la ropa parezca más impresionante o cara".

Igee Okafor, influencer de moda masculina y fundador de la plataforma de estilo Bond Official, recurre a J. Mueser, con sede en Nueva York, que ofrece chaquetas de traje acabadas a mano (desde US$1.450), pantalones (US$550) y camisas (desde US$245).

Para prendas fuera del estante, Okafor recomienda Ferragamo, en particular las piezas del director creativo Maximilian Davis, cuya primera colección con la marca fue en septiembre de 2022 para la temporada Primavera/Verano 2023. Davis ofrece una visión refrescante del lujo tranquilo, como demuestran los pantalones chinos de US$1.190 y el polo de piqué Jersey de US$560.

Para conseguir un lujo discreto en la oficina, también sugiere echar un vistazo a marcas conocidas como Ralph Lauren, Theory y Dunhill -especialmente para las clásicas chaquetas de traje-, por no hablar de diseñadores parisinos como AMI, Fursac y Jacquemus, que aplican una dirección creativa innovadora a toda una gama de artículos, desde piezas informales hasta ropa formal contemporánea.

"Céntrate en la sastrería, el ajuste y los tejidos de la máxima calidad", dice Okafor.

Utilice los accesorios como puntos de exclamación

A menudo, la mayor (infra)declaración de lujo discreto se produce a través de artículos que son esencialmente utilitarios: la chaqueta que necesita para abrigarse o el bolso que guarda sus necesidades.

"Un buen abrigo y un bolso llamativo son muy útiles para vestir a diario en la oficina", dice Olivia López, escritora de estilo y autora de Lust for Los Angeles, citando el bolso Triomphe de Celine (US$28.600) en piel de cocodrilo de color piedra caliza como una compra poderosa.

En cuanto a los abrigos, dice: "Vístete según tu tipo de cuerpo. Juega con las proporciones".

Por ejemplo, considere estas dos opciones contrastantes de Bottega Veneta: un abrigo de algodón recubierto largo, delgado y ajustado a la forma en blanco tiza (US$4.100) y un abrigo de piel repujada de ajuste oversize (US$7.750) confeccionado en piel de becerro en color henna. López cree que este último se adhiere a las reglas del lujo discreto -aunque sea brillante y de corte más holgado- por su color cálido y natural, la artesanía superior que lo respalda y su ausencia de logotipos.

Y aunque uno no tiene por qué estar tan comprometido como Okafor con el minimalismo y la codificación del color -ha llegado al punto de preferir no llevar metales preciosos que contrasten, como el oro y el platino, el mismo día-, hay que prestar más atención a las joyas, ya que resaltarán aún más frente al ambiente discreto del lujo tranquilo. "Un reloj bonito, un anillo bonito, un collar bonito", dice. "Ahí es donde se muestra un poco la personalidad".

Chaudhuri sugiere incorporar una reliquia familiar como accesorio de oficina: un collar de uno de los padres o incluso un reloj que alguien espera heredar. Y aplicar una mentalidad de lujo tranquilo también al aseo personal. "Incluso las uñas siguen la misma tendencia o, incluso más, vuelven a lo clásico", afirma. "Se ha visto a famosas con uñas nude llamadas 'uñas de chica rica', que es básicamente un guiño al lujo tranquilo".

¿Y las corbatas? No la convierta en un signo de exclamación literal: Deben integrarse en el conjunto, no distraer de él. A pesar de la tentación de atreverse con colores brillantes y contrastados, elija un elegante pañuelo de cuello en un tono sutil, como la corbata plateada de sarga jacquard de US$275 de Tom Ford, y un estampado menos rimbombante, como la corbata Saint-Honore de US$240 de Hermès.

Use su mejor calzado

En la oficina, la gente tiende a subestimar hasta qué punto el calzado puede telegrafiar una impresión de gracia y clase. "Opta por un mocasín o una bota baja para evitar los clichés de la indumentaria corporativa", recomienda MacKinnon.

Para las mujeres, sugiere el elegante botín Bloc (US$1.450) de Bottega Veneta, los mocasines de piel color crema de The Row (US$1.220) y el botín Glove Stretch Ankle Boot naranja medio de Proenza Schouler (US$695), con un imponente tacón en bloque. Para los hombres, MacKinnon recomienda el elegante botín de piel de becerro de Ferragamo (US$1.550) o los mocasines de nobuk Emerson (US$1.190) con costuras tonales de The Row.

En todas estas opciones, los ajustes sutilmente potentes de las geometrías, las costuras precisas y los materiales duraderos hablan suavemente de su valor.