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Cinco de los artículos de la colección fueron producidos de la forma tradicional y luego fueron convertidos en versiones digitales animada
Un token no fungible o NFT es conocido como un activo que tiene la posibilidad de ser único e irrepetible debido a que emplea tecnología blockchain, con lo que es posible certificar tanto la originalidad del activo como a quién le pertenece, de tal forma que no exista forma de copiar su código. De hecho, dicha tendencia ha llegado hasta la industria de la moda de alta costura, el arte y hasta las casas de lujo.
Una de las marcas que más caro ha ofertado uno de estos productos es Dolce & Gabbana, que lanzó un NFT conocido como Collezione Genesi, que recaudó más de US$6,12 millones y que basaba su estructura en un modelo híbrido, físico y digital, de nueve piezas de aspecto físico de la moda y aspectos no tangibles.
De hecho, cinco de los artículos de la colección fueron producidos de forma tradicional y luego fueron convertidos en versiones digitales animadas por el estudio Unxd. Al final, los compradores obtuvieron el artículo físico y el virtual, siendo este último transferible al metaverso de preferencia y atrayendo a su vez una clientela tradicional hacia un nuevo tipo de mercado.
Otra de las marcas que entró en la onda de este tipo de productos fue Rtfkt con la colección Fewo Sneakers. Esta marca, recientemente adquirida por Nike, ejecutó un modelo similar al de D&G, con lo que logró recaudar US$3,10 millones. Así mismo, los artículos de Burberry tuvieron un costo de US$374.978 y se pueden usar y revender en el juego de fiesta digital Blankos Block Party.
No obstante, marcas como Givenchy, Gucci y Louis Vuitton entraron en este mercado, exclusivamente con NFT basados en diseños gráficos, una película que presenta su moda, junto a un videojuego. Aún así, las ventas resultaron menos rentables, generando solo $159.000 para Givenchy y $25.000 para Gucci.
El desarrollo de esta industria le ha abierto un nuevo camino para la propiedad en el mundo en línea, un entorno marcado por una capacidad casi ilimitada de difundir y compartir contenidos. Así mismo, los NFT también han llegado a industrias como la de los videojuegos. Allí, representan activos como personajes mejorados, o con una apariencia o habilidad específica, que luego se venden en línea a otros jugadores.
La industria del deporte también se unió al boom de los NFT, donde marcas como la NBA ya se sumaron a la nueva tecnología, vendiendo videos de repeticiones de jugadas. Entre los más caros está la repetición de una jugada de LeBron James en 2020, que está valorada en US$240.000 millones. En este mismo sector, La Liga de España anunció un acuerdo con la plataforma de juegos en línea Sorare, que utiliza tecnología blockchain para validar las transacciones de cartas digitales de futbolistas (NFT).
Otras marcas en el mercado, como Paramount Pictures, Warner Music, BBC Studios, Nike, LVMH y Samsung han empezado a desarrollar los NFT en su propia industria.
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