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Tolima y Antioquia son algunos de los departamentos más atractivos para los ciclistas, allí hay condiciones geográficas para exigirse
La actividad física hace algunos meses venía arraigada a la cuestión de asistir a un gimnasio. Sin embargo, luego del confinamiento estricto que se vivió durante la contingencia, las actividades al aire libre se incrementaron, siendo el ciclismo la que tuvo más auge.
Además de recorrer lugares del territorio y conocer la exuberancia de paisajes y culturas que existen en Colombia de una forma natural y ecológica, el ciclismo es un medio para que todos los aficionados puedan poner a prueba sus exigencias físicas, mediante los diferentes circuitos que conforman ascensos y descensos de todo tipo de cumbres y montañas.
Una de las rutas más reconocidas es el Alto de las Letras. Ubicada en el municipio de Mariquita en el Tolima, es reconocida por tener 80,5 kilómetros de ascenso y una pendiente media de 4%. Conquistarlo es considerado “la graduación de todo ciclista aficionado”.
Si desea dirigirse hacia las ciudades costeras del país y recorrer estos territorios marítimos y calurosos, la ruta Mayapo y Manaure es la indicada. Iniciando desde la ciudad de Riohacha, el recorrido involucra las playas de Mayapo donde puede hacer una parada técnica, y refrescarse para continuar con el trayecto de cinco horas y llegar finalmente a Manaure.
Para los aficionados capitalinos la sabana centro ofrece una gran variedad de rutas, pero, el alto de los patios es uno de los más destacados. Este circuito se encuentra al nororiente de la ciudad, conduce hacia el municipio de La Calera y parte desde la Carrera Séptima entre calle 84 y 85 y finaliza en el peaje del municipio. El recorrido cuenta con una altitud de 2.600 a 3.020 metros sobre el nivel del mar.
El ascenso se puede realizar cualquier día de la semana, sin embargo, es preferible hacerlo los sábados o domingos con el fin de contar con la compañía de más ciclistas. Por otro lado, es necesario mencionar que este circuito no cuenta con una vía exclusiva, por lo tanto, se debe realizar con prudencia debido al tráfico vehicular. Al llegar a la meta, podrá encontrar diversidad de restaurantes y espacios para recuperarse de los 9 kilómetros de este recorrido.
Si usted se considera un ciclista de un mayor nivel de resistencia, el alto de las palmas, en Medellín, debe ser su próxima meta. Puede iniciar este circuito con diferentes variantes, aunque, una de las más conocidas es la Ruta Normal, iniciada en la glorieta de San Diego. Esta vertiente es un alto duro de primera categoría, con 15,6 kilómetros al 6,6% de pendiente media. La parte más exigente se encuentra en los 10 kilómetros finales con 7,3% de inclinación.
Finalmente, para tener una mejor experiencia, los expertos recomiendan realizar con anterioridad un mantenimiento técnico y especializado del medio de transporte, así mismo llevar consigo un kit de despinche, bomba y aire es indispensable.
También es esencial conocer previamente sobre el recorrido que se hará, pues con base en eso, se puede disponer de las herramientas necesarias como hidratación adecuada, bloqueador solar, entre otros elementos.
Es importante tener un entrenamiento y una preparación física adecuada antes de enfrentarse a algunos de estos ascensos para no sobreexigirse.
Destaca el ‘Jarrón con flores’ que fue pintado en 1956, un año clave en la trayectoria del maestro. La pieza tiene un precio de salida de $250 millones y puede alcanzar hasta $450 millones
El tenis es una industria que mueve cerca de US$7.860 millones al año y que entrega jugosas cifras en premios como la del US Open 2024, que dio al ganador US$75 millones