MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
Agregue a sus temas de interés
Hay un buen número de espacios que se han enfocado en que los lectores no solo busquen un título para llevar, sino también quedarse por un café o a escuchar música
Toda buena lectura va mejor si está acompañada por el ambiente ideal para dedicarse a explorar ese libro que tiene en las manos, y al que le dedicará cierta cantidad de tiempo.
De eso sí saben algunas librerías del país que además de ofrecerle la posibilidad de leer o llevarse un libro, le brindan toda una experiencia entorno al arte de las letras. Algunas cuentan con áreas de recreación en zonas verdes, otras con espacios de ocio cerrados, con oferta gastronómica como café, un coctel o postres, e incluso, con música en vivo aún en pandemia.
Con el surgimiento de plataformas digitales como Amazon que ofrecen libros en línea, la batalla de las librerías físicas es por la atención y el tiempo de los lectores, especialmente los independientes, que están en el eslabón más débil del mercado del libro.
“Nuevas actividades y posibilidades en el ámbito de la lectura le generan al cerebro neurogénesis, es decir, nuevas neuronas y también, lo que se llama, neuroplasticidad”.
“Muchas librerías le están apostando a convertirse en espacios de encuentro, porque los libros ya no se venden solos. Por lo que ahora es una forma distinta de comercializar”
En la capital, más que en otras ciudades metropolitanas, la oferta es amplia. Existen librerías como Matorral que tienen conexión directa con una cervecería, unión que permite el buen disfrute de la lectura junto con una tipo lager o ale.
También está Santo & Seña que, además de libros, ofrece discos, vinilos, objetos raros y música alternativa internacional, se podrá apreciar de la mano de un té japonés o coctel.
Y es que, según los psicólogos, acudir a lugares recreativos puede ser de gran ayuda para incentivar la lectura lejos de los aparatos digitales.
Néstor Dionissio Prieto, quien es psicólogo, afirma que este tipo de librerías de experiencias son aptas para incentivar la lectura, puesto que la rama de la psicología dice que esto ayuda a la neurogénesis y neuroplasticidad del cerebro.
En otras ciudades capitales como Medellín se encuentra Bookstore que cuenta con espacios didácticos como escondites y cubículos para leer.
Por su parte en Cali se encuentra Casa Alebrije Café libro que es un templo rodeado de bibliotecas, libros, máquinas de escribir y sofás de lectura.
En Bogotá visite también La Valija de Fuego.
Matorral Librería ofrece espacios al aire libre y una cervecería
La librería está aliada también con una café para ofrecer a sus lectores diversas posibilidades de acompañar la lectura. Lo que se busca es trascender el modelo tradicional de ir y comprar un libro y, por el contrario, ir para quedarse un rato, como explicó su copropietario, Andrés Archila. Así mismo, se podrá degustar comida de cafetería. Matorral es fuerte en libros de literatura y ciencias sociales. También se podrá encontrar productos para escribir o leer.
La Valija y el Fuego, un lugar para lectores “alternativos”
Hace más de 10 años existe esta librería capitalina que logró destacarse dentro de su sector debido a su oferta de títulos alternativos que no se suelen conseguir en otras mucho más tradicionales. Se ha posicionado como un lugar de “largas charlas, así como para momentos solitarios de reflexión y gozo entre el café y la cerveza”. En La Valija de Fuego suelen tener punk y rock en vivo como banda sonora. Estos también se desempeñan como editorial.
Bookstore, Medellín, ofrece espacios didácticos
Es una librería didáctica con espacios coloridos y zonas de ocio para leer y tomar café. También ofrecen una agenda cultural variada para niños de hasta 10 años. Actualmente, la librería ajustó sus servicios pues hoy cuenta con aforo máximo para respetar el aislamiento social. El espacio tiene incluso WiFi si busca trabajar. Entre sus servicios está la promoción de lectura, los talleres y se pueden comprar regalos especiales.
Santo & Seña ofrece clubes de lectura y espacios comunales
En el barrio Chapinero se encuentra esta librería que se autoproclama así misma como un lugar de experiencias. “Generamos espacios de intercambio mediante sesiones de escucha musical, lanzamientos de nuestros álbumes, conversatorios con algunos personajes de renombre y con los autores de las obras que creamos y distribuimos”, dice en su sitio web. Santo y Seña también ofrece catar bebidas como cervezas artesanales.
Casa Alebrije Café Libro, en Cali,es un templo para la lectura
En una casa rústica y de estilo antiguo se encuentra este templo de la lectura que ofrece, además de libros, delicias del café, cocteles, licores y un restaurante con opciones livianas y pensadas para compartir y probar. Casa Alebrije fue pensada también para albergar encuentros literarios, charlas con escritores y atrapar a sus mejores lectores con el diseño novedoso de su biblioteca. Se encuentra ubicada en el barrio San Antonio.
La oferta turística de bienestar ya representa una industria mundial de US$6,32 billones y que crece 25% anual; esto la hace más grande que sectores como el farmacéutico
Servinformación cumplió 25 años de trayectoria, a lo largo de estas dos décadas y media, la compañía ha experimentado un crecimiento exponencial
Para un país que prioriza desde hace mucho tiempo un estilo de vida equilibrado y una buena gobernanza sobre el beneficio económico
