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En Colombia cada vez tienen más acogida este tipo de celebraciones en las que se ven desde pasteles de colores hasta avionetas
Es posible que el algoritmo de redes sociales ya le haya mostrado uno que otro video de revelación de género, que haya asistido a una de estas celebraciones o, incluso, que la esté preparando.
Lo cierto es que se ha convertido en un infaltable para muchas familia. Inicialmente, tenía fuerza en EE.UU., pero cada vez se globaliza más.
María de Los Ángeles Osorio, gerente de eventos Bella Suiza, comenta que la buena acogida se debe, además de que está de moda, a que es una forma “original y divertida de descubrir el sexo del bebé en compañía de familiares y amigos”.
¿Cómo se hace? Una persona, familiar o amigo se encarga, junto con los organizadores del evento, de incluir una actividad con la que se haga la revelación, la cual será sorpresa para todos, principalmente, para los papás.
Algunas de las opciones populares son soltar globos de colores, por ejemplo, rosa, azul o algunos más creativos usan verde o amarillo; que dentro del pastel la crema tenga el color; e incluso avionetas con banderas o humo de color.
Los precios varían de acuerdo a lo que le incluya a la celebración. Un pastel listo para la dinámica, por ejemplo, le puede costar desde $300.000 para 40 personas; mientras que la avioneta puede llegar a $3,2 millones.
En Colombia esta celebración es cada vez más popular y su realización se ha incrementado. En escenarios como los AC Hoteles, que ofrecen planes especiales, las cotizaciones se han incrementado 30% en el año y se reciben más de 20 solicitudes a la semana.
De acuerdo con Heydi Aarón, propietaria Music To go, empresa realizadora de eventos, si quiere hacer una “revelación de género estándar, para 40 personas”, debe alistar unos $12,6 millones y si son más de 50 la cifra puede llegar hasta $20 millones.
Este costo final tiene en cuenta el pastel, una mesa de dulces, menú para los invitados con entrada y plato fuerte, música en vivo, solo guitarra y voz por una hora, cinco horas de DJ, bebidas, y personal de servicio de cuatro personas, con lo que le faltaría sumarle la decoración y, si quiere, los recordatorios para los invitados.
La cifra, entonces, dice Aarón, puede sumar más de $70 millones, dependiendo de su elección, el número de invitados y el lugar del evento.
“Hay personas que hacen revelaciones mucho más costosas, que piden, por ejemplo, un presentador, un artista urbano, músicos en vivo, y nos piden también el alquiler de las locaciones. Tenemos casos con montaje de luces, tarima y sonido”, precisa.
Las firmas organizadores estiman que el precio puede incluso duplicar el de un baby shower convencional. En esta otra celebración, la cual también es la elegida para las familias que prefieren no anunciar el género del bebé o dejarlo a su disposición para cuando crezca, la costumbre es recibir regalos por parte de los invitados, que van desde ropa, cunas y coches, hasta libros, juguetes y pañales, muchos pañales.
Las dinámicas suelen ser menos llamativas y por lo tanto costosas. No se requeriría una avioneta que arroje papeles, por ejemplo.
Según Aarón cuando organizan un baby shower tampoco se contratan equipos especiales para que boten humo de colores ni pirotecnia, que suelen ser otras de las opciones que suben los costos del evento, pero, dependiendo del gusto de la familia, la cifra siempre puede escalar aún más.
Otras de las opciones que se han popularizado es la de usar pirotecnia, como comentó la organizadora; o tableros de votación, en los que los invitados ponen una marca, ya sea si votan que es niña o si es niño. También se usa ir vestido del color que cree será el sexo del bebé, por ejemplo, azul o rosado.
Del lado de los globos, que pese a que han sido criticados por su impacto medioambiental dada su composición, siguen siendo una de las decoraciones más solicitadas para celebraciones, precisan los organizadores de eventos.
Los precios de esta decoración pueden ir desde $60.000 hasta $10 millones, dependiendo el número de globos seleccionados y la estructura, pues algunos clientes optan por hacer figuras especiales o arcos para la zona de los regalos, los pasabocas y el pastel.
En el caso de ambos eventos no se puede quedar por fuera el fotógrafo y el realizador audiovisual, quienes se encargarán de darle contenido para las redes sociales. Los precios, dependiendo el paquete que compre, pueden ir desde $300.000 hasta $7 millones.
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