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La venta de artículos de lujo no estuvo exenta de los efectos de la pandemia, pero las compras de joyas y accesorios como bolsos, apuntan a acelerar la reactivación
Después del año pasado, en el que las ventas de la industria del lujo disminuyeron 23%, el comportamiento del mercado muestra algunas tendencias de recuperación orientadas al consumo de la generación Z y las compras de joyas y accesorios; así lo indica la consultora ‘Bain & Company’ y la asociación italiana Altagamma en un estudio realizado sobre la venta de artículos de alto valor, en todo el mundo, y durante el primer trimestre del 2021.
Una de las características que se encuentran en el análisis y que se prevé que sea tendencia a lo largo del año, es el aumento de 1,5% de compra de marcas de lujo por parte de la generación Z, y el consumo de las personas desde los 20 años, pues esto ha impulsado la reactivación en EE.UU.; lo que hace cada vez más relevante para las marcas prestarle atención a la mentalidad de las generaciones más jóvenes, que además cada vez tienden a ser más exigentes en términos de experiencia del cliente y buscan afirmar su identidad a través del estilo. Igualmente, en épocas post-covid, buscan marcas que tengan compromiso social con la sostenibilidad, la diversidad, la equidad y la inclusión.
Otra característica relevante es el incremento en la adquisición de artículos de lujo de segunda mano por parte de clientes más jóvenes que aspiran tener objetos de valor a un menor costo, y por otro lado, por personas con un perfil de coleccionistas que compran referencias sin importar que no sean nuevos.
Como ya ha sido una tendencia global, las transacciones en línea se han incrementado y en el mercado del lujo este método de compra se dio en 85% de las ventas durante los primeros tres meses del año. Esto ha permitido que nuevos clientes adquieran artículos de lujo por primera vez; y las categorías que han aumentado en ventas son accesorios como zapatos y bolsos exclusivos, y nuevas colecciones de joyería. Mientras que el consumo de ropa disminuye, pero se espera que aumente con la vuelta a la vida social.
Finalmente, el estudio plantea dos pronósticos posibles sobre la recuperación de esta industria. Por un lado calcula que se podrían alcanzar las cifras de 2019 en este año si se logran ventas entre mínimo US$300 millones, y US$338 millones; pero tiene una probabilidad del 30% que suceda. Pero por otro lado, el escenario con 70% de probabilidad indica que para alcanzar las cifras prepandemia en este año se debería vender más de US$300 millones, para luego en 2022 llegar a US$370 millones en transacciones.
“La sostenibilidad y la ética son dos temas bastante relevantes para nuestra generación, por lo que tendemos a valorar que las marcas representen valores sociales más allá de la mera producción”.
“Está claro que los consumidores todavía quieren comprar artículos de lujo, y esto, junto con la capacidad de las marcas para adaptarse, está impulsado un retorno al crecimiento en el mercado”.
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