La cadena hotelera 'The Ritz-Carlton' amplía su flota con dos nuevos superyates de lujo

Tras el éxito de su primer superyate, la cadena hotelera de lujo está construyendo en Francia dos nuevos barcos. El "Ilma" se botará en 2024 y los billetes para el viaje inaugural ya están a la venta.

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Estos días de principios de abril el "Evrima" navega tranquilo por las aguas del mar Caribe entre la isla de Tórtola y San Juan (Puerto Rico). A bordo, alrededor de 400 afortunados disfrutan del know how hotelero de una de las cadenas premium del mundo: The Ritz-Carlton. La división de cruceros de la firma norteamericana, Ritz-Carlton Yacht Collection, botó este primer barco, Evrima, el pasado 15 de octubre, en un viaje inaugural que partió de Barcelona y terminó en Niza.

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Hubo a quien le extrañó esta incursión de la hotelera en el universo de los cruceros de lujo, pero Donna McNamara, vicepresidenta y global brand leader de The Ritz-Carlton, lo tiene muy claro: "La marca siempre se ha esforzado en evolucionar e innovar. Vimos una oportunidad en la categoría de cruceros de lujo y supimos que, combinando nuestro excelente servicio y la libertad que supone viajar en yate, podríamos atraer a clientes que buscan experiencias personalizadas y de lujo, al mismo tiempo que les ofrecíamos una nueva forma de explorar el mundo junto a la firma The Ritz-Carlton". No debe de haberles salido mal la jugada, porque apenas seis meses después ya están construyendo dos nuevos superyates en el astillero francés de Chantiers de l'Atlantique.

Ilma y Luminara, los nuevos barcos de Ritz-Carlton Yacht Collection

Se trata de dos barcos gemelos, que llevarán los nombres de Ilma y Luminara y saldrán a la mar en 2024 y 2025, respectivamente. Su estructura y servicios a bordo será muy similar a la del primer barco y, aunque mantienen el tamaño íntimo, serán algo más grandes que el Evrima (240 m de eslora, frente a 190).

El diseño interior, que definen como "artesanía moderna", corre a cargo del estudio británico AD Associates y también de DPA Lighting, especializado en iluminación. El exterior lo firma Aivan, una compañía finlandesa de diseño de embarcaciones, quienes para este trabajo se han inspirado en "la elegancia de los yates privados".

En el proyecto también se ha tenido en cuenta el compromiso con la sostenibilidad. Las naves estarán propulsadas por gas natural licuado -el combustible fósil menos contaminante-, utilizarán sistemas avanzados de tratamiento de aguas, un eficiente circuito de recuperación de calor e iluminación LED, entre otras cosas, para minimizar el impacto medioambiental.

Los dos nuevos superyates tendrán 228 suites, todas con terraza privada, y serán algo más grandes que las del primer yate. De hecho, dos de las estancias superarán los 100 metros cuadrados. El interior no desmerece lo que se espera de la habitación de un hotel Ritz-Carlton: ventanas de suelo a techo, cama de tamaño extragrande, baño con doble lavabo, amenities premium, ropa de cama de lujo..

A la hora de sentarse a la mesa, los cruceristas podrán elegir entre cinco restaurantes, tomar un aperitivo en seis bares (y una bodega), donde habrá actuaciones en directo de jazz y música clásica, y los espacios comunes incluirán living room, biblioteca, spa con sauna y sala de vapor y cabinas de tratamientos, solárium e infinity pool en cubierta, y un gimnasio. Si se viaja con niños, estos tendrán acceso a la programación infantil Ritz Kids.

"La colección de yates The Ritz-Carlton es realmente diferente a cualquier otra. Nos hemos asegurado de que cada viajero tenga una experiencia transformadora tanto en tierra como a bordo. Desde el tamaño que nos sitúa entre los barcos de ultralujo y los superyates, hasta los interiores que reflejan lo que uno podría encontrar en un yate privado, y la libertad para que los huéspedes diseñen su día como deseen y exploren cada puerto", nos explica Donna McNamara.

Excursiones en tierra

Así, en tierra los huéspedes pueden elegir entre varias experiencias, llamada The Shore Collection, o utilizar los servicios de Concierge Ashore para personalizar los tours privados. Estos incluyen visitas guiadas a los principales museos con sus comisarios, traslado a lugares declarados Patrimonio de la Humanidad, clases de yoga en una playa privada, lanzarse en tirolina sobre un bosque tropical o salir a recolectar trufas, entre otras cosas. "En algunos itinerarios, los huéspedes pueden optar por dormir una noche en tierra, y después emprender el viaje hacia el siguiente destino", explica McNanamara.

Aunque las reservas para 2024 se abrirán el próximo otoño, ya se han puesto a la venta los billetes para el viaje inaugural del Ilma, que recorrerá el Mediterráneo y recalará en puertos de Italia, Grecia, Marruecos y Egipto. Después de este primer viaje, se ofrecerán itinerarios de entre siete y 10 noches por el Mediterráneo y el Caribe en régimen de todo incluido. Los precios partirán de 6.165 euros por persona. También es posible chartearlos de forma privada. Desde luego, no parece un mal plan.