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Las minicarteras han evolucionado conforme lo ha venido haciendo la moda, la tecnología y lo monetario. A pesar de lo digital, es un artículo que sigue en uso
Uno de los pocos accesorios de la moda que han acompañado y evolucionado conforme avanza la humanidad, y que, usan tanto hombres como mujeres, han sido las tradicionales billeteras o minicarteras. Un artículo que data desde el siglo XIII, y que a la fecha, aunque con desafíos, sigue vigente, a pesar de la digitalización.
Su vigencia se debe a una razón, y es que nació ya con una funcionalidad, que era ayudar a cargar objetos del día a día con mayor comodidad y facilidad. Desde sus inicios, dicen los historiadores de la moda, su uso era más para cargar provisiones de alimentos y para ese entonces, en el siglo XIII, su modelo y diseño se trataba de una especie de bolsa (ver gráfico).
Recién se creó el papel moneda, las billeteras se popularizaron y se convirtieron en el accesorio más usado en las personas. “Las carteras y billeteras han sido históricamente uno de los productos de moda que más se ha usado en la sociedad”, dijo Fabrizio Fiorillo, gerente superior de marketing de Vélez.
Desde ahí, casi que se podría decir que los cambios en los modelos de las billeteras han bailado al mismo ritmo que lo hacia la evolución de la gestión de las finanzas personales. Por ejemplo, con el surgimiento de las tarjetas de crédito, estas minicarteras, fabricadas tradicionalmente en tela o cuero de vaca, comenzaron a incorporar bolsillos especiales para estas.
“Las tarjetas de crédito jugaron un papel importante en la remodelación de los diseños de billeteras y ofrecieron opciones más delgadas con ranuras dedicadas”, dijo Fiorillo
Así, a lo largo de los siglos, han evolucionado notablemente para reflejar los cambios tecnológicos, de moda y hasta monetarios.
Por eso mismo, la billetera plegable se hizo popular en la década de 1950, cuando surgieron las tarjetas de crédito.
“Si lo vemos desde una perspectiva funcional, las carteras han tenido una evolución, adaptándose a nuevos dispositivos de tecnología”, dijo Fiorillo.
Aunque su función principal ha sido la de guardar objetos, sobre todo dinero, las marcas de moda que se apropiaron de este invento han venido también dándole un estilo que refleje en su porte la personalidad de las personas, con diseños atractivos. Así, se han convertido también en todo un accesorio de moda que luce también a la vanguardia de los nuevos diseños. “Son accesorios que se adaptan también a la versatilidad de los roles de las mujeres y hombres; por supuesto estos productos se han convertido en íconos de moda y una extensión de la personalidad de los clientes”, expresó el gerente superior de marketing de Vélez.
Hoy, el mayor desafió de este tipo de artículos es la digitalización, pues el dinero cada vez más se guarda y se usa ahora desde los dispositivos móviles. Sin embargo, esto no es del todo amenazante, marcas como Vélez logran vender 190.000 billeteras en un cinco meses, y se prevé que el mercado global de artículos pequeños de cuero crezca a una tasa anual compuesta de 6,4% hasta 2028, según Bloomberg.
Esto también porque las marcas están evolucionando este modelo, con minicarteras que ahora sirven hasta para guardar el celular. “Nuestro accesorio más vendedor es una billetera en donde cabe gafas, celular y mas”, dijo Nora lozza, dueña de la marca con su mismo nombre.
“La billetera destaca por su versatilidad y por su capacidad de perdurar en el tiempo”, agrega Vélez.
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