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Una de los puntos más importantes está en elegir bien el maridaje.
Una de las recetas o ingredientes que no pueden faltar en la tradicional cena navideña es la tabla de quesos. Ya sea para disfrutar de las festividades o contemplar otro tipo de sabores, esta puede ser el acompañante ideal para disfrutar el plato principal.
Por eso, LR le presenta las cinco claves para diseñar su tabla, pues más allá de los quesos envejecidos, blandos, duros y azules, es importante saber combinar los sabores para no saturar el paladar de los comensales.
“Antes que nada, se debe tener en cuenta que en bandeja es recomendable que no hayan más de seis variedades de quesos. Lo ideal es pasar por el abanico más amplio, por ejemplo, de quesos suaves a los más potentes. Estos pueden ser acompañados con vino, claramente, y con cerveza”, señaló Víctor Marín, gerente de la Peseta.
Marín aclaró, en primer lugar, que a la hora de empezar a construir la bandeja es necesario colocar un tipo por cada familia. “Los comensales deben tener claro lo que buscan, por ejemplo, de la familia de quesos envejecidos, uno de los más comunes es el Cheddar. En la de los blancos, el Brie o el Camembert también son importantes. En los duros, el Provolone es un buen amigo para degustar los azules. Por ahí se debe iniciar a la hora de hacer una buena tabla de quesos”.
Luego de enlistados los sabores, la segunda clave se centra en escoger su acompañante, los cuales, pueden ir desde una gran variedad de galletas hasta rebanadas de baguette. Según Marín, “es recomendable disfrutar acompañantes con sabores suaves, por ejemplo, en muchas ocasiones las manzanas o las uvas pueden ser un complemento perfecto para disfrutar de la sensación de sabores”.
El tercer punto a tener en cuenta se centra en definir las porciones de acuerdo al número de personas. Esto, debido a que es recomendable ofrecer de 1 onza a 1,5 onzas de cada tipo de queso por persona.
Frente a este tema, es importante resaltar que a la hora de emplatar es fundamental colocar trozos en cantidades impares, pues los quesos suelen degustarse de esta manera.
El cuarto consejo es diferenciar los sabores. Esto se refiere a la variedad de salsas o aderezos que acompañan los quesos, los cuales pueden ser nueces tostadas, mermeladas de vino, mostarda italiana, tarta de higos o tarta de dátiles.
Para finalizar, un vino o una cerveza son las bebidas preferidas para acompañar los quesos. “Cuando no se tiene un alto presupuesto una cerveza es ideal para disfrutar los quesos, sin embargo, se pueden encontrar vinos que no sobrepasan los $60.000, por lo que también sería una buena opción”.
En materia de precios, el chef aclaró que para armar una tabla de quesos con acompañantes, el presupuesto es de más o menos $100.000. Sin embargo, esta cifra varía dependiendo del número de comensales. En cuanto a las bebidas, se pueden encontrar vinos blancos que están entre $50.000 y $120.000.
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