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Más de 160 diseñadores colombianos, entre independientes y emergentes, participarán. La internacionalización es la principal meta
Desde hoy y hasta el 21 de mayo, Bogotá se apropia del título “capital de la moda” con su Fashion Week 2022. Este año, según comentó la gerente del evento, María Paz Gaviria, la sostenibilidad será el concepto global, que se consolidará con más de 160 diseñadores.
“Con esta plataforma buscamos posicionar a la capital como el epicentro de moda que efectivamente es y fortalecer a los diseñadores. En cuanto a tendencias, veremos colecciones más inclusivas, genderless , con más tamaños y participación de lo artesanal”, precisa Gaviria.
Para ello, además de espacios para los negocios, venta al por mayor, al detal y stands tipo pop-up para las marcas, se realizarán pasarelas en la que los visitantes podrán apreciar qué trae de nuevo la moda colombiana.
Mónica Holguín, directora creativa y diseñadora de Pepa Pombo, cuenta que para esta temporada destacaran las colecciones atemporales, multiforma y prácticas. En cuanto a colores, el rojo, los chocolates y el gris serán los protagonistas.
“Nosotros le estamos apostando a una temporada muy diversa, con prendas que se pueden usar de varias formas. Y también vemos que es importante seguir abriendo mercados internacionales”, dice Holguín.
“Buscamos posicionar a Bogotá como un epicentro de moda e incentivar el consumo de moda colombiana. Ya hay una mayor conciencia de los consumidores”.
“Este es un momento importante para la moda colombiana, tenemos mucha moda por mostrar y la meta con Bogotá Fashión Week es poder internacionalizarla”.
El diseñador de Guzo, Jorge Guzmán, explica que la versatilidad en los diseños del BFW, también apunta a el slowfashion y poder usar una misma prenda más tiempo con procesos sostenibles. En sus colecciones el lino será protagonista.
“En cuanto a tendencias, estamos pendientes de lo que pasa en las pasarelas internacionales, pero le ponemos nuestro toque artesanal y colombiano”, precisa Guzmán.
Finalmente, en materia de joyería, y en línea con lo que trazan las marcas textiles, la atención estará puesta en los diseños llamativos, el dorado y la naturaleza como inspiración.
“La tendencia actualmente es todo lo maxi: collares, anillos, aretes grandes. Los colores que estamos viendo, ahora que estamos entrando a la normalidad, es el verde y el vino”, concluye el diseñador Álvaro Ávila.
Los participantes, coinciden en que, además de cautivar al público local, otra de las metas con el evento es impulsar la internacionalización de las marcas y el reconocimiento del “Made in Colombia”.
"Vemos una proliferación de diseñadores que están exportando, existe un posicionamiento de moda a nivel global y Colombia ha empezado a ser reconocido como uno de los nuevos destinos a mirar. Eso es lo que buscamos hacer desde BFW", concluye Gaviria.
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