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Alguna vez pensaste en quien fue el primer loco o simplemente muerto de hambre que con la desesperación de no tener nada que comer, se encontró con este molusco en algún mangle...
... lo llevó a la orilla, y luego de cortarse todas las manos para abrirlo y encontrarse con el que considero uno de los moluscos mas feos y morbosos, ¡tuvo el coraje de comerlo!
Pues sí, las ostras no son muy atractivas a la vista que se diga, pero qué sabor tan impactante que tienen. Son consideradas como una joya gastronómica, y los mejores restaurantes del mundo las incluyen en su menú.
Sus precios son elevados y esto tiene una explicación. Para garantizar la frescura de una ostra, esta debe permanecer viva hasta el momento en que se vaya a consumir. De lo contrario podemos intoxicarnosi, o peor aún, contagiarnos con alguna tipología hepática, algo que no queremos que suceda.
Por lo tanto, estamos dispuestos a pagar altos precios. Pero eso sí, queremos verlas vivas y bailando. Quien imaginaría que a 2.650 metros sobre el nivel del mar podemos comer ostras frescas, y mas allá de que estén vivas, son algunos de los mejores ejemplares que puedas conseguir.
No es fácil encontrarlas y mucho menos conservarlas. Ese trabajo se lo dejamos a los señores propietarios de Exxus Oyster Bar (Av. Calle 116 No. 71-39).
No solo cuentan con una gran variedad de ostras de distintas partes del mundo, sino también tienen una piscina donde las mantienen vivas bajo condiciones específicas.
El sabor de las ostras varía de acuerdo con su tamaño y procedencia. En mi parecer, las más grandes, de cultivo y profundidad, son mucho más atractivas a la vista pero menos sabrosas que las pequeñas y feas que se adhieren a los mangles.
A la final, no soy ningún especialista en ostras, en realidad ni me gustan mucho, pero todo cambio cuando tuve la oportunidad de comer una ‘Ostra Shigoku’
Hace un tiempo atrás escribí en mi blog (www.bogotadivina.com) un artículo sobre estas. Básicamente explicaba que la semilla se obtiene en Japón y son cultivadas por Taylor Shellfish Farms en el estado de Washington, en el Noroeste de los Estados Unidos.
Son ostras de cultivo y se obtienen en bolsas ubicadas cerca a la playa. La cosecha es cada 6 ó 7 meses y la producción está entre 2.400 y 3.600 unidades. Esto genera unas 300 cajas de producto anual, de las cuales 100 son enviadas a Exxus Oyster Bar.
Recomiendo llamar antes de pegarse el viaje hasta allá y llevarse la sorpresa de que no hay ostras. Recuerden que además de consumirlas en su restaurantes, son los proveedores mas importantes de ostras frescas del país.
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