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Carlos Arturo Gallego, presidente de Termales El Otoño, habló sobre cómo se ha venido comportando la empresa
Hace más de 20 años nació en Manizales una opción de turismo de naturaleza con la oferta de los Termales El Otoño, que tiempo después se convirtió en todo un complejo hotelero que, además de incluir la opción de aguas termales, ofrece un tipo de alojamiento de lujo en la región, con suites que van hasta más de $1 millón por noche.
Carlos Arturo Gallego, presidente de la compañía, habló sobre cómo han evolucionado los servicios de Termales El Otoño, y sus planes de expansión.
“Las recientes nevadas han convertido al Nevado en un atractivo aún más espectacular, y El Hotel Termales Otoño, con su cercanía y servicios de alta calidad, es el lugar ideal para disfrutar”.
La idea inicial fue mi padre, Arturo Gallego Estrada, quien toda la vida ha sido una persona inquieta: vio que existían las aguas termales arriba cerca al Nevado del Ruiz y decidió bajarlas cerca de la ciudad porque para él ir hasta la altura tenía una serie de limitantes por vías y por altura.
Tenemos 20 cabañas con habitaciones, cada una con jacuzzi de agua termal, tres piscinas, dos para huéspedes y una para transeúntes. Además, tenemos dos restaurantes, y un centro de estética con masajes y baño turco.
Además, contamos con un centro de convenciones del país, con un auditorio para 600 personas, seis salones múltiples para 100 personas cada uno, sala VIP, tres camerinos, dos salas de prensa, sala de traducción simultánea y tecnología para eventos corporativos.
Entre $300.000 hasta más de $1 millón para el caso de la suite presidencial, que cuenta con más de 200 metros² de área, zona social, oficina, piscina privada y una buena vista.
Nosotros en un puente podemos tener entre 350 y 400 personas alojadas en el complejo hotelero.
Este año vamos en 58,3%, pero esperamos llegar a 60% este año, que sería una excelente ocupación para nosotros.Si nos proyectamos para dos años, en ese periodo buscamos llegar a una ocupación de al menos 70%.
Este año más o menos 15%. La mayoría de las empresas están decreciendo o en el mejor de los casos manteniendo ingresos, pero este no ha sido nuestro caso.
Estamos desarrollando todos los nuevos charcos termales, ampliamos restaurantes, e hicimos más habitaciones. También estamos planeando la construcción de dos hoteles. Pero más que esto, queremos que los termales en general se conviertan en un producto importante en Colombia, el cual nos empiece a dar una identidad.
El potencial en Colombia es infinito. Pero es importante que se garantice la seguridad y no dejar que esto decaiga, porque si no hay seguridad, no hay turismo, sobre todo el internacional.
Locales del Valle o Bogotá, o extranjeros que buscan o descansar, o hacer eventos de negocios.
Carlos Arturo Gallego, aunque es piloto de profesión, nunca lo ejerció, en cambio, decidió hace 25 años dedicarse al sector de hotelería y turismo, experiencia que le ha servido para liderar la empresa familiar heredada por su padre, Termales El otoño, donde actualmente es el presidente.
El Hotel Termales El Otoño fue galardonado con el XXIV Trofeo Internacional de Turismo, Hostelería y Gastronomía en Madrid, España, en 1999, como uno de los mejores hoteles del mundo.
Obedeciendo a las actuales tendencias en los viajeros, este espacio ofrece una experiencia de interacción con el paisaje de la isla
Al entrar, los visitantes son recibidos por una decoración que incluye suelos de mármol, techos engalanados en tonos ámbar con detalles dorados
El barco, con capacidad para 650 pasajeros, tenía previsto partir originalmente de la capital de Irlanda del Norte en mayo, pero tuvo que ser reparado debido a problemas con los timones
