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Además de ofrecer una mayor intimidad, estos yates tienen diseño de autor, gimnasios con última tecnología, tours a islas privadas y terrazas privadas
Si bien la intención con la que se reserva un crucero es vivir una experiencia cerca al mar, con los superyates seis estrellas lo menos que querrá mirar es el océano. Esto, debido a sus instalaciones y servicios de lujo, que le prometen al huésped sentirse en un ambiente más reservado.
¿Por qué sucede eso? La mayoría de estas naves tienen muy poca capacidad de tripulantes, por lo que los huéspedes se podrán sentir en un ambiente más reservado. Seabourn, Scenic Eclipse, Ritz-Carlton, Silver Origin y Le Champlain son algunos de los yates de este tipo.
Si bien esta tendencia de los cruceros seis estrellas aún está emergiendo, para Catalina Jaramillo, cofundadora de Viajala, las redes sociales han sido sus grandes potenciadores. “El turismo de lujo también se ha convertido en moda; los viajeros buscan subir sus experiencias a las plataformas sociales y compartirlas con sus contactos. Además, los cruceros de lujo ofrecen comodidades adicionales a los tradicionales como alimentación gourmet, trato preferencial o habitaciones con más espacio”, señaló la directiva.
Por ejemplo, entre las características de los superyates de Seabourn se encuentra el diseño, que lo hará sentir como si se alojara en una obra de arte. Adam Tihany, el interiorista que creó algunos de los espacios de estos cruceros, es conocido como el ‘diseñador de hospitalidad’ pues su trabajo se enfoca en crear una infraestructura que genere una mayor relajación cuando se hospeda fuera de su casa.
El diseño también caracteriza al crucero Le Champlain, que eligió una inspiración futurista para promover el descanso en sus 184 usuarios, creando una atmósfera más íntima.
El nivel de lujo seis estrellas hace que, incluso, algunos de los servicios sean tan exclusivos que no puedan encontrarse en tierra. Ese es el caso de Scenic Luxury, que cuenta con yates como el Scenic Eclipse, en donde los huéspedes tendrán la posibilidad de llegar en un helicóptero, además de tener servicios exclusivos como gimnasios con máquinas de última tecnología que permiten estimular su cerebro.
La comodidad y los destinos exclusivos también son fundamentales en este tipo de naves. En cruceros como el Ritz -Carlton y Le Champlain es posible acceder a suites con terrazas privadas con vista al mar, además de visitas a islas privadas.
La gastronomía también toma protagonismo en esta industria. Por ejemplo, Silver Origin tiene un restaurante con cocina de autor, donde el comensal disfrutará de platos de reconocidos chefs.
Scenic Eclipse
Uno de los elementos exclusivos que tiene el crucero, además de su helipuerto, es su gimnasio equipado con una tecnología que es difícil de encontrar aún en tierra. Dicho desarrollo del centro de acondicionamiento es capaz de estimular el cerebro para que los músculos se adapten más rápido a los movimientos.
Seabourn
Entre los aspectos que más se destacan de este crucero de lujo es su diseño. Adam Tihany, uno de los arquitectos e interioristas más reconocidos del mundo, se encargó de delinear cada metro del megayate, que tiene una atmósfera de club privado.
Ritz-Carlton
Considerada como una de las compañías de cruceros más lujosas del mundo, todas las suites de su colección de yates tienen terrazas privadas con vista al mar y servicios personalizados.
Silver Origin
El crucero perteneciente a la marca Silversea cuenta con visitas a islas privadas. Adicionalmente, su restaurante ofrece cocina de autor, con ingredientes y preparaciones exclusivos.
Le Champlaim
Con capacidad para únicamente 184 personas, este crucero de la marca Ponant promete intimidad para los huéspedes. Además, sus instalaciones están inspiradas en un diseño futurista.
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