La Fundación ha venido trabajando con estas comunidades desde hace nueve años, incentivando a la asociación de los recicladores para que trabajen unidos y, de esta manera, se genere una mayor formalización del empleo y se puedan buscar alternativas para hacer rentable su trabajo y que se mejore su calidad de vida.
De hecho, actualmente ocho de las organizaciones de reciclaje aprobadas por la Superintendencia de Servicios Públicos el año pasado corresponden a proyectos con los que ha trabajado la Fundación durante este tiempo, y dos de esas ya están haciendo efectivo el cobro de la tarifa estipulada.
Según informaron en un comunicado desde la organización privada, para la creación de estas pequeñas empresas, un total de 604 recicladores fueron certificados en competencias laborales individuales y grupales y también se organizaron diferentes eventos para promover la política pública inclusiva de recicladores.
“El trabajo que se adelanta desde la Fundación contribuye a la materialización de los sueños de los recicladores y sus familias para que encuentren en el reciclaje un oficio digno”, afirmó Mabel Sánchez, coordinadora de la Fundación del Grupo Familia.
De acuerdo con la firma, el apoyo a los recicladores se hace a través de bodegas conocidas como Unidades Productivas de Reciclaje (Uder), que son espacios físicos en los cuales se comercializa y transforma el material reciclable.
Dichas unidades son propiedad de las asociaciones y cooperativas de recicladores y son “el canal para crear organización social y la formalización de la actividad económica”, decía el comunicado.
No obstante, la Fundación Grupo Familia también resaltó que es importante que cada vez más hogares y establecimientos comerciales se sumen a la cadena de reciclaje en su proceso de recolección de desperdicios, para que con esto se puedan mejorar los ingresos de los recicladores, así como optimizar los procesos de separación de los materiales recliclables de los que no lo son.
“El apoyo de la Fundación Grupo Familia ha sido fundamental para tener una mejor calidad de vida gracias al permanente acompañamiento psicológico, productivo, educativo - de primaria, bachillerato y educación técnica-, educación financiera y con el mejoramiento de sus viviendas”, dijo la entidad.
