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La industria lucha por sostener un equilibrio entre un negocio que crece, pero también un usuario con mayor consciencia
En los últimos años, el segmento fast fashion de la industria de la moda comenzó una búsqueda por encontrar la balanza entre mantener un negocio pujante con cifras que se sobrepasan cada periodo y un usuario que ahora mucho más consciente de sus compras.
Esta tarea viene de la mano de las miles acusaciones que ha recibido la industria en los últimos años sobre su papel como uno de los mayores agentes contaminantes del mundo, un calificativo del que busca desprenderse un paso a la vez.
“Si bien la industria de la moda es una de las que más polución causa y que produce aproximadamente 10% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, las empresas de moda y textiles están adoptando estrategias para contaminar menos”, comentaba Leticia Ossa Daza, socia Directora Práctica LatAm Paul, Weiss NY, en una reciente columna de opinión para LR.
En esta postura también coincide Daniela Castro, asesora de imagen y marca personal, quien asegura que este nuevo cambio de mentalidad en la industria “se analiza con mucha ilusión y expectativa”.
“También considero que es algo mandatorio actualmente, es decir, no tienen otra opción más que reformular procesos”, complementó la experta.
Tal como lo señala la analista, la reformulación de los procesos productivos es la clave para que el segmento fast fashion se vuelva más amigable con el medio ambiente.
Para Castro, una parte importante de estos esfuerzos está en el uso de materiales sostenibles como algodón orgánico o poliéster reciclado, innovaciones con desechos de plástico.
También otra medida que se está impulsando es el reciclaje de ropa usada para darle una segunda vida a partir de su tratamiento y nuevos diseños.
Leticia Ossa Daza agregó que también se están implementando nuevos procesos en las plantas de fabricación, como reutilización de agua, energías y químicos; y también favoreciendo la trazabilidad y la transparencia en la cadena de distribución de la empresa.
“Algunas empresas como Patagonia, Adidas y Levi Strauss & Co, entre otras tantas, están ofreciendo programas de reparación de prendas, usando plásticos reciclados en los océanos para producir sus productos e innovando en sus procesos para reducir el consumo de agua”, comentó Ossa Daza.
La sostenibilidad fue uno de los temas que se conversaron en la reciente edición de Colombiamoda 2024 en Medellín.
Según reseñó el Politécnico Grancolombiano, en esta ocasión, se contó con un pabellón de moda sostenible, foros y conferencias sobre el tema y pasarelas de diseñadores locales e internacionales que expusieron sobre este tema dentro de la industria, así como la presentación de colecciones hechas con materiales ecoamigables y procesos sostenibles de producción.
Algunas de las marcas que participaron en estos encuestros sostenibles fueron Guzo, Selva y Flora, entre otros.
El estudio hecho por GRI, Nuam y PWC reveló que sólo 1% de las empresas analizadas cumplieron las expectativas con el tema
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