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Las luces LED son las bombillas que más ahorran luz en el mercado de la actualidad.
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Con este producto todas las organizaciones pueden llegar hasta un ahorro de 50% a comparación de las que son incandescentes
El medio ambiente es una preocupación en la actualidad para todos los sectores de las sociedades. Este hecho es clave para que una empresa u organización, sin importar el tamaño, pueda destacar dentro del los mercados actuales, ya que, si una de estas no tiene fundamentos en la sostenibilidad, no incrementará su crecimiento.
Dentro de esto el uso de energía es clave para cuidar el medio ambiente y también para ahorrar dinero en las facturas de cobro final. Por esto, las luces LED son las bombillas de la actualidad, que son las más adecuadas para bajar los niveles de uso de energía y cuidar el medio ambiente para los hogares o las empresas.
Celsia dice que con la implementación de estas luces se puede llegar a ahorrar 825.571 kWh al mes, el cual representa 1.645 toneladas de CO2 dejadas de emitir al año. Además, recalcaron que estas ahorran más de 60% respecto a las bombillas incandescentes, y entre 10% a 20% en comparación a las lámparas conocidas como de bajo consumo.
La vida útil de las luces LED pueden llegar a más de 50.000 horas de vida mientras que las tradicionales solo alcanzan 1.000. También las bombillas o iluminación LED reducen su luminosidad en 70% y aun así, siguen funcionando. De esta manera se logra evitar reemplazos de las luminarias y costos excesivos en mantenimiento.
"El ahorro de energía debe ser una prioridad para las empresas, no solo por la oportunidad que ofrece para la reducción de costos, o la posible ventaja competitiva que se puede lograr, sino un compromiso moral para contribuir con un desarrollo sostenible”.
Gustavo Yepes, profesor de la universidad Externado de Colombia y experto de Caracol Sostenible, dijo que “el ahorro de energía debe ser una prioridad para las empresas, no solo por la oportunidad que ofrece para la reducción de costos, o la posible ventaja competitiva que se puede lograr, sino un compromiso moral para contribuir con un desarrollo sostenible”.
Además, agregó que “aunque la matriz energética de Colombia es muy ecológicamente eficiente, con mar de 70% de fuentes renovables en promedio, aun hay retos importantes. Como el de asegurar que las zonas que aún usan energía basada en carbón inicien una rápida transición y las empresas pueden ser un actor fundamental en ese proceso”.
