Casi todos tenemos una historia de iniciación con la lectura. Generalmente empieza con ese libro que, de niños, nos atrapó y fundó el hábito. Para mí, ese libro que me abrió la puerta a un mundo fantástico fue El Hobbit de J.R.R. Tolkien.
Tristemente, esa no es la historia de todos los niños en Colombia. De acuerdo con una encuesta aplicada a padres colombianos con hijos entre cinco y 10 años, tan sólo tres de cada 10 niños lee una vez a la semana, fuera de las tareas del colegio; mientras que en países como Chile y Argentina, esta proporción es el doble.
Y no es que los padres colombianos consideren poco importante la lectura a temprana edad. De hecho, unánimemente, 95% consideran muy importante que sus hijos lean porque así desarrollan el lenguaje, el vocabulario, la creatividad y la imaginación; habilidades que les servirán para toda la vida.
Aparentemente, hay una desconexión entre lo que queremos para los niños y lo que termina pasando en el día a día. Las dos principales razones que cuentan los padres consultados son la falta de libros adaptados a los diferentes gustos y edades de los niños e, igualmente, la preferencia de los menores por la tecnología y los videojuegos.
Sin embargo, los padres también tienen la respuesta. 75% de los encuestados afirma que la clave está en leer más con sus hijos y 63% sugiere que deben incorporar la lectura al juego. Así es que los padres colombianos saben a conciencia que deben convertirse en los protagonistas de esta historia, para que leer no sea una tarea u obligación, sino parte del juego y del tiempo de calidad que comparten con sus hijos.
De esa necesidad nace la campaña “Libro o Juguete” en la Cajita Feliz de McDonald’s. En Colombia. ya hemos entregado más de 65.000 libros en el menú infantil y estamos emocionados por el éxito de los libros en nuestros restaurantes; porque creemos en el poder de leer y jugar para fortalecer el vínculo entre padres e hijos. Además, en unión con la Fundación Dividendo por Colombia (United Way) entregaremos miles de libros infantiles a instituciones educativas de 23 municipios del país, para que en decenas de colegios, los estudiantes tengan acceso a textos que los enamoren de la lectura. Nuestra apuesta es sembrar la semilla de la lectura en miles de niños colombianos.