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Las cifras del colegio médico colombiano confirman que 16% de los profesionales de la medicina hoy se sienten emocionalmente agotados, 20% están frustrados o aburridos en su trabajo y el 15% tienen fatiga
¿Qué tanto sufre de estrés, depresión o ansiedad el personal de la salud en el país? ¿Cómo los galenos pueden cuidar su salud mental, pese a la presión que enfrentan en su trabajo? Preguntas que invitan a reflexionar y ponen sobre la mesa un tema que ha crecido en el último tiempo: El Síndrome de Burnout.
Las cifras del Colegio Médico Colombiano confirman que el 16 % de los profesionales de la medicina hoy se sienten emocionalmente agotados, el 20 % están frustrados o aburridos en su trabajo, el 15 % tienen fatiga permanente y el 18 % se sienten, literalmente, “quemados” en su labor. Las mujeres, en el 66 % de los casos, son las que presentan mayores síntomas de cansancio emocional.
Asimismo, otras encuestas realizadas por diferentes instituciones académicas han evidenciado que por lo menos el 40 % de los médicos están desmotivados, mientras que sólo un 30 % se encuentra feliz con la actividad que realizan.
Por disciplinas, los profesionales de la medicina que tienen mayores niveles de estrés, ansiedad y depresión, entre otros, son los que están haciendo el Servicio Social Obligatorio (SSO), seguidos por los médicos internos y generales. Por especialidades, los que tienen más problemas de salud mental son los ginecólogos y pediatras.
Esta situación de agotamiento laboral puede estar relacionada con la alta carga laboral y emocional de esta profesión, con el estrés y la tensión que se vive en el día a día atendiendo a los pacientes y con la intensidad horaria laboral que es mucho más alta frente al promedio de otras carreras.
Asimismo, siguen preocupando los datos que confirman la ideación suicida en algunos estudiantes de las Ciencias de la Salud, en particular aquellos que están en últimos semestres. Sólo en 2023, un estudio realizado por las escuelas de medicina de la ciudad de Bucaramanga advirtió que el 15 % de los futuros galenos han pensando en quitarse la vida, en tanto que el 5 % ya lo habían intentado.
1. Durante los turnos, deben sacar tiempo para hablar y conectarse con familiares, amigos y colegas, a través de llamadas o videollamadas. Esto es clave, especialmente para los trabajadores de la salud que permanecen mucho tiempo solos en sus consultorios.
2. Entre consultas o, al menos en el espacio del almuerzo o de descanso, es importante que hagan pasatiempos o cualquier otra actividad que disfruten, como dibujar, coser, leer, realizar cursos online, etc.
3. Establecer una ventana de preocupación. Este es un momento para sentarse, pensar y reflexionar sobre la situación que los preocupa o más los tensiona. Para esto, se aconseja escribir las preocupaciones que se les han venido a la mente durante el día.
4. Priorizar actividades de bienestar al finalizar la jornada y recordar los tres motivos del día que los hizo sentirse orgullosos de su trabajo. Por ejemplo, cuando entregaron un diagnóstico oportuno a un paciente o hicieron un procedimiento que mejoró la salud de una persona enferma.
5. Si a pesar de seguir estas indicaciones, se presenta un malestar emocional persistente, se recomienda solicitar ayuda médica y/o psicológica.