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Estrategias para evitar dolor en el cuerpo mientras trabaja
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Hay herramientas y dispositivos que le ayudan a tener mejor ergonomía, para cambiar su postura y facilitar sus tareas en el trabajo
En el entorno laboral actual, es común que los empleados pasen largas horas sentados frente a un ordenador, lo que puede llevar a la aparición de dolores musculoesqueléticos y otros problemas de salud. Hernando Márquez, especialista en salud ocupacional, resaltó la importancia de adoptar medidas preventivas para mejorar el bienestar físico en el trabajo.
Una de las estrategias más eficaces para prevenir dolores musculoesqueléticos es la ergonomía, que implica adaptar el espacio de trabajo a las necesidades del usuario. Esto incluye el uso de sillas con soporte lumbar, altura ajustable y asientos acolchados. También se recomiendan escritorios ajustables que permitan alternar entre estar sentado y de pie, lo que ayuda a reducir la fatiga muscular. Además, es fundamental contar con reposapiés si los pies del trabajador no alcanzan el suelo de manera cómoda, y soportes de monitores que mantengan la pantalla a la altura de los ojos.
La educación postural es crucial. Capacitar a los empleados sobre la postura correcta puede marcar una gran diferencia en su salud. La rotación de tareas es otra estrategia recomendada; cambiar de actividad regularmente evita la repetición prolongada de movimientos, que puede ser perjudicial.
“Implementar estas herramientas y estrategias en el entorno laboral puede prevenir dolores musculoesqueléticos y promover una mejor calidad de vida para los empleados”.
Implementar pausas activas es fundamental. Realizar breves descansos para estirarse y moverse cada 30 a 60 minutos puede prevenir tensiones acumuladas. Márquez sugiere varios ejercicios de estiramiento que se pueden hacer durante la jornada, tales como rotar suavemente la cabeza, inclinarse hacia adelante para estirar la espalda, y realizar movimientos de muñecas y caderas. Estos ejercicios no solo mejoran la flexibilidad, sino que también ayudan a aliviar la tensión muscular.
La tecnología también puede ser un aliado en la lucha contra los dolores laborales. Existen wearables que actúan como sensores de postura y vibran cuando detectan una mala posición.Aplicaciones como PostureZone o ErgoWeb pueden guiar a los usuarios en la correcta configuración de su espacio de trabajo, mientras que recordatorios automáticos como Stretchly o Workrave ayudan a recordar la importancia de las pausas activas.
La gestión del estrés es otro aspecto crucial para mantener el bienestar en el trabajo. Técnicas de respiración profunda, pausas breves cada hora, y prácticas de mindfulness o meditación pueden ser efectivas para aliviar la tensión acumulada. Al finalizar el día, realizar ejercicios de relajación muscular progresiva también puede contribuir a una mejor recuperación física.
El entorno laboral, incluida la iluminación, también influye significativamente en la salud física del trabajador. Una iluminación inadecuada puede provocar fatiga visual y dolores de cabeza. Se recomienda utilizar iluminación indirecta y evitar el deslumbramiento. La temperatura y la ventilación del espacio de trabajo son igualmente importantes para asegurar el confort, mientras que el ruido excesivo puede afectar la concentración y aumentar el estrés.
Para aquellos que trabajan con dispositivos electrónicos, es esencial seguir ciertas recomendaciones. Mantener el monitor a la altura de los ojos previene la tensión en el cuello. El uso de filtros de luz azul o gafas especializadas puede reducir la fatiga ocular. Se deben emplear teclados y ratones ergonómicos para evitar el síndrome del túnel carpiano y seguir la regla del 20-20-20: cada 20 minutos, mirar un objeto a 20 pies (seis metros) durante 20 segundos.
Es importante fomentar una cultura organizacional que priorice el bienestar físico y mental de los empleados. Esto puede incluir la implementación de programas de salud ocupacional que ofrezcan talleres sobre ergonomía y manejo del estrés. Las empresas también pueden considerar la posibilidad de incorporar espacios para el ejercicio, como gimnasios o áreas de descanso, donde los empleados puedan realizar actividades físicas breves durante la jornada laboral. Asimismo, promover el trabajo que permita a los empleados elegir su entorno de trabajo.
