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La avena, las proteínas, las frutas y los frutos secos pueden aportar las kilocalorías necesarias para tener mayor productividad
El refrán, dime con quién andas y te diré quién eres, también aplica en el ámbito de los alimentos, pues los productos que usted consume están muy relacionados con el estilo de vida que lleva.
De hecho, también influye en la agilidad con la que desarrolla sus actividades diarias, pues en muchos casos, una mala alimentación puede llevarlo a tener menos ganas de trabajar o de ser productivo.
Pero entonces, ¿qué alimentos podrían ayudarle para aumentar su energía en el trabajo?
Gisella Martínez, pediatra de centros médicos Colmédica, aseguró que, “las fuentes de energía para nuestro organismo provienen, principalmente, de las grasas o lípidos que dan nueve kilocalorías; los carbohidratos que dan cuatro kilocalorías y las proteínas que también dan cuatro kilocalorías”.
Sin embargo, debe haber una alimentación balanceada, porque “si comemos muchas grasas para tener más energía y no hacemos ejercicio, vamos a tener un riesgo de aumentar el perfil lipídico y además un riesgo cardiovascular”, añadió Martínez.
Entonces, sabiendo esto, hay que buscar alimentosproporcionales a su actividad diaria.
“Si no somos deportistas y tenemos una vida sedentaria en el trabajo, la energía puede provenir, por ejemplo, de frutos secos, porque tienen ácidos grasos saludables que no se van a convertir en colesterol malo, ni se van a acumular en las arterias. También puede provenir de frutas como el banano y la manzana, o de carbohidratos como la avena”, aseguró Martínez.
Además, la pediatra dijo que desayunar huevos y consumir proteínas durante el día ayudan a ganar energía, junto con alimentos germinados y verduras.