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Cada persona es diferente, por lo que la cantidad de horas que necesita dormir va a depender de diversos factores como la edad
Contrario a las creencias que suelen transmitirse a través del voz a voz, no dormir disminuye la productividad y genera más dolores de cabeza, literalmente. Según un estudio publicado en ‘Journal Sleep’, quienes duermen menos de seis horas rinden menos, especialmente porque su forma de procesar la información y desarrollar actividades se ve truncada por el cansancio y agotamiento.
Así mismo, investigaciones adelantadas por en universidades como Harvard, han determinado que dormir poco puede incidir significativamente en afecciones cardiacas, sumado a daños en el funcionamiento cognitivo y otras enfermedades como la diabetes y el cáncer.
Según Adriana Martínez, miembro de la Asociación Colombiana de Neurología, “es necesario promover y adquirir hábitos de sueño que puedan impactar positivamente en su día a día, siendo el dormir una práctica sana que puede garantizar un cambio vital. Se requiere un impulso de energía duradero para verse, sentirse y rendir al máximo, permitiéndole establecer horarios y adoptar una disciplina en su vida”.
Lo primero que debe tener en cuenta es que dormir permite restablecer las funciones físicas y psicológicas esenciales para disfrutar de un pleno bienestar al día siguiente. De hecho, existen diversas fases cuando decide ir a la cama.
Inicialmente se da la ‘Fase No-REM’ (Movimiento ocular no rápido), la cual está conformada por cuatro estadios en los que se va profundizando progresivamente en el sueño. La transición de la fase uno a la cuatro dura aproximadamente 90 minutos.
El sueño comienza en la primera fase, un periodo de adormecimiento que dura entre uno y siete minutos. La segunda parte se caracteriza por una caída en el ritmo cerebral, acompañado de un estado de relajación muscular generalizado, una disminución del ritmo cardiaco y respiratorio, así como la desaparición de los lentos movimientos oculares del inicio del sueño. Las dos últimas fases corresponden al sueño profundo.
Por otro lado, la ‘Fase REM’ (Movimiento ocular rápido) se caracteriza por una gran actividad cerebral y fisiológica similar al periodo de vigilia. Allí es cuando aparecen los sueños extravagantes, surrealistas y afectivamente cargados. Esta dura 20 minutos y su primer estadio se presenta entre los 80 y 90 minutos del inicio del sueño. A lo largo de la noche, este tipo de sueño se va alternando con las distintas fases del sueño no REM, aunque la mayor parte del REM se produce al final de la noche.
¿Cuántas horas es ideal dormir?
Según Cinfasalud, laboratorio farmacéutico español, cada persona es diferente y sus necesidades de sueño también lo son. La cantidad de horas que necesita dormir dependerá de diversos factores como la edad.
En el recién nacido, el tiempo de sueño es de 16 a 18 horas o más; los adolescentes necesitan unas nueve horas de sueño; un adulto, una media de siete u ocho horas, y un anciano duerme alrededor de seis horas y media. A medida que envejecemos el sueño se hace más frágil y se interrumpe con mayor facilidad.
Algunos de los consejos a la hora de dormir se basan en establecer horarios regulares para descansar, mantener la cama en buenas condiciones, regular los horarios de comida, evitar las siestas largas durante el día, realizar ejercicio físico, establecer un ritual que le relaje antes de irse a dormir y alimentarse saludablemente.
Otras opciones son estar en la cama con las luces apagadas a la hora de acostarse cada noche, configurar una alarma para la hora de acostarse que le recuerde cuándo es hora de prepararse para acostarse, apagar al menos 30 minutos antes de acostarse su teléfono, computadora, tableta y televisor.
Cuando consiga adaptarse a un sueño mucho más saludable, se dará cuenta que su creatividad habrá aumentado, habrá perdido peso ligeramente, mejorará su memoria, protegerá su corazón y salud en general, además de gozar de una mejor salud mental y emocional.
