Sin incluir la refinación, la industria creció solo 0,5% el año pasado

De acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), la industria nacional creció tuvo una variación de 3,5% en lo corrido de 2016, incluyendo la refinación de crudo. 

Este resultado coincidió con el crecimiento esperado por los empresarios en la Encuesta de Opinión Industrial, dada a conocer por la Asociación Nacional de Empresarios (Andi).

Según el Dane, este es el incremento anual más alto desde 2012, cuando la industria cayó 0,3%, al igual que en 2013, cuando la contracción fue de 1,3%. 

Sin embargo, al excluir el efecto de la Refinería de Cartagena, la producción manufacturera pasó apenas raspando el año, pues solo creció 0,5%, en este caso, menor a lo que esperaban los industriales, que le habían apostado a un cierre de año llegando a 1%.

Con este resultado, vuelve el temor de los analistas quienes vienen anticipando que a medida que se cumple un año desde la puesta en marcha de Reficar, su aporte a la economía nacional será cada vez menor. 

Nada más, en noviembre de este año, la refinación solo aportó 0,2 puntos porcentuales a la producción manufacturera del país, arrojando un crecimiento de 2,7%. 

Si observamos solo el comportamiento de diciembre, su crecimiento llegó hasta 11,2%, estando lejos de las cifras registradas en los primeros meses del año, donde se acercaba casi a una variación de 30%. 

José Roberto Acosta, profesor del Cesa, cree que esto no deja una buena perspectiva para el año, pues el hecho de que este sea único sector más destacado “quiere decir que no hemos sabido aprovechar la sustitución de importaciones, soportada en al devaluación del peso, para estimular el desarrollo de otros sectores”. 

Así las cosas, Acosta estimó que “aunque no auguro a la industria un buen 2017, la devaluación puede ayudar a impulsar todo el tema de alimentos y bebidas, sobretodo el tema de licores, que tuvo un mecanismo proteccionista que le aplicaron desde el Congreso”, por la ley de licores aprobada el año pasado.  

Así les fue a los sectores 

El Dane arrojó que el sector que más aportó fue la refinación, con un crecimiento de 19,4%, y una contribución de 3,1 puntos porcentuales a todo el desempeño de la industria, seguido de la fabricación de productos de metal, con la segunda variación más alta, llegando hasta 9,8%. 

En tercer y cuarto lugar, quedaron la producción de productos de molinería y almidones, que creció 8,7%, junto con la elaboración de bebidas, con un crecimiento de 7,6%, lo que de acuerdo con Carolina Lorduy,  directora de la Cámara de Alimentos de la Andi, está explicado por el incremento de las ventas en el mercado local, por un mayor consumo de alimentos y específicamente, de los sectores mencionados. 

Para Lorduy, “la producción de estos productos se compensa con las ventas del mercado local y podría obedecer a la devaluación de la moneda y a lo que se dejó de comprar en el exterior.

Sin embargo, consideró que hay una paradoja en el comportamiento en el consumo de alimentos, si se tiene en cuenta que las importaciones, excluyendo el café y sus productos, se duplicaron el año pasado. 

En contraste, entre los sectores que no les fue bien el año pasado, fue el curtido de cuero, que se contrajo 18,1%, seguido de la fabricación de carrocerías y remolques, con una reducción en su industria de 14,6%, de acuerdo con los datos del Dane. 

Ventas y ocupación

El año pasado las ventas reales de la industria crecieron 3,3%, mientras que el personal ocupado por el sector manufacturero se redujo 0,3%, siendo el sector de bebidas el que más compensó la reducción de los empleos. 

Ventas minoristas crecieron levemente

De acuerdo con el Dane, las ventas del comercio minorista tuvieron un incremento de 1,2% en 2016, teniendo en cuenta que las mayores contribuciones vinieron de las ventas que se hicieron en las líneas de electrodomésticos, muebles para el hogar y equipo de informática y telecomunicaciones, ya fueran para uso personal o doméstico. En contraste, las ventas de productos de aseo personal, cosméticos y perfumería, así como de vehículos automotores y motocicletas, restaron al comportamiento del sector.

La opinión

Carolina Lorduy
Directora de la cámara de Alimentos de la Andi
“Esperamos un 2017 positivo, que logremos ajustar los factores que no nos dejan ser competitivos y volvernos exportadores, no ocasionales sino hacerlo sistemáticamente”.